Star Wars y sus personajes han servido de referente a varias generaciones, que siguen la saga con pasión, pero la franquicia también ha servido de inspiración en el campo de los avances biotecnológicos. En Singapur, unos científicos han usado como referencia el brazo robótico de Luke Skywalker para crear una piel sintética que es capaz de reproducir la sensación de tacto.

Una de las escenas más icónicas de la franquicia galáctica es el momento de 'El Imperio Contraataca' en el que Darth Vader le corta la mano a Luke antes de revelarle que es su padre. El joven Jedi escapa por los pelos y, ya de vuelta con los rebeldes, su brazo es reemplazado por una extremidad robótica que, de hecho, se ve igual que la original. Ahora, cuarenta años después de esa escena, la humanidad está un poco más cerca de poder hacerla realidad.

Según informa Screentrant, los investigadores de Singapur han desarrollado una piel sintética que ayudará a las personas con extremidades artificiales a volver a recuperar sensaciones que emulan el sentido del tacto. La revolucionaria tecnología ha recibido el nombre de Piel Electrónica Codificada Asincrónica (o ACES), y aún se encuentra en una primera etapa de desarrollo.

El Instituto Nacional de Singapur ha explicado que ACES puede procesar la información incluso más rápido que el sistema nervioso humano y por el momento puede reconocer entre 20 y 30 texturas diferentes. Mientras que la piel humana sólo puede determinar una textura por el roce, este tejido sintético es capaz de reconocerla en un único contacto.

Esta nueva tecnología abre un mundo de prometedoras posibilidades, pero no es la primera vez que la galaxia de George Lucas inspira proyectos científicos.

Es de sobra conocida la Iniciativa de Defensa de Estados Unidos de los años 80 denominada 'Programa Star Wars', y también se le atribuye a la franquicia algunos avances tecnológicos actuales, como los hologramas o los robots con inteligencia artificial.