Después de cinco días desde que saltó el escándalo de la filtración masiva de los datos de 50 millones de usuarios de Facebook, Mark Zuckerberg, por fin, ha roto su silencio. En un comunicado publicado en su propia red social, reconoce haber cometido errores con Cambridge Analytica y promete nuevas medidas para incrementar privacidad y seguridad de los usuarios. En una entrevista en la CNN, además, se ha comprometido a que no volverá a ocurrir. Busca así recuperar la confianza perdida tanto en la bolsa como entre sus usuarios, después del movimiento que está cogiendo fuerza en las redes sociales bajo el lema #EliminaFacebook, donde piden a la gente darse de baja de la red social.