Hyundai Motor Group ha desarrollado la primera tecnología Continuously Variable Valve Duration (CVVD) que empleará en futuros vehículos Hyundai y Kia, y que permite un ahorro de combustible del 5%, según informó la empresa en un comunicado.

Esta tecnología de control de válvulas regula la apertura y cierre de la válvula en función de la conducción, con un aumento del 4% en el rendimiento y una mejora del 5% en la eficiencia del combustible. Además, se reducen las emisiones un 12%.

Para el presidente y jefe de Investigación y Desarrollo de Hyundai Motor Group, Albert Biermann, el desarrollo de la tecnología CVVD "es un buen ejemplo de cómo Hyundai Motor Group está fortaleciendo las tecnologías de los sistemas de producción". "Continuaremos nuestros esfuerzos de innovación para producir cambios y asegurar la sostenibilidad de nuestro modelo de negocio", ha explicado.

Hasta ahora, el rendimiento de un motor de combustión interna ha funcionado con tecnologías que controlaban el tiempo de apertura y cierre de válvula, como es el caso del Continuosly Variable Valve Timing (CVVT), o el volumen de aire de admisión, con el ejemplo del Continuosly Variable Valve Lift (CVVL).

La gran novedad del CVVD es poder controlar todo el tiempo de apertura de la válvula, pues cuando el vehículo mantiene una velocidad constante y requiere una baja potencia del motor, el CVVD abre la válvula de admisión desde la mitad hasta el final del recorrido de comprensión, lo que mejora la eficiencia del combustible.

Presentación del nuevo motor Smartstream G1.6 T-GDI

Presentación del nuevo motor Smartstream G1.6 T-GDIJunto con la tecnología CVVD, Hyundai ha presentado el motor Smartstream G1.6 T-GDi Engine, una unidad turbo de gasolina V4 con 180 caballos de potencia. Se trata además del primer motor en utilizar la tecnología CVVD y cuenta con recirculación de gases de escape a baja presión (LP EGR).

Además, cuenta con un Sistema Integrado de Gestión Térmica que calienta o enfría el motor a una temperatura óptima, y un potente sistema de inyección directa que alcanza los 350 bares, por encima de los 250 del anterior motor T-GDi. La fricción también se reduce un 34%.