Existen vehículos que solo pueden ser desenfundados por todo lo alto, con una especie de aura icónica y sentida por todos los presentes. El lanzamiento oficial del BMW i7 en España es una de esas jornadas cargadas de historia, tanto por la relevancia de este buque insignia como por la apuesta electrificada que supone su aparición en la gama. El BMW Serie 7 va ya por su séptima generación, un total de 45 años de elegancia elevada al cuadrado y acompañada de todo el arsenal tecnológico habido y por haber en la firma.

El Teatro Real (Madrid) fue el lugar escogido para conocerlo en primera persona y quedarnos fascinados con el sinfín de comodidades, lujos y gadgets que incorpora esta carrocería de 5,39 metros de largo. El Serie 7 solo estará disponible en la variante de batalla extendida, con 1,95 metros de ancho, 154 metros de alto y una distancia entre ejes de 3,21 metros. Os podéis imaginar la amplitud de sus plazas traseras, pero paso a paso.

Es mejor ir de pasajero

Eneste artículo os hablamos de uno de los detalles más significativos de este nuevo BMW Serie 7 e i7: la pantalla trasera. Es, más bien, un cine móvil catalogado como ‘Theater Screen‘ por su enorme pantalla táctil de 31,3 pulgadas y tecnología 8K.

A través de las pantallas, de 5,5 pulgadas cada una, situadas en las puertas de los pasajeros traseros podemos desplegar la del techo. El sistema de audio Bowers & Wilkins se encarga del resto para conseguir una inmersión alucinante.

Gracias a la conexión 5G del nuevo Serie 7, los acompañantes podrán disfrutar de las principales plataformas de entretenimiento e incluso seguir a su streamer favorito mientras circulan. Me imagino, más bien, al CEO de una empresa en plena reunión de camino al aeropuerto o echándose una cabezadita gracias a la posibilidad de reclinar los asientos hasta convertirlos en una cómoda butaca con los pies elevados.

Sentarse en su enorme banqueta trasera es como hacerlo en un jet privado, y eso que todavía no he tenido la ocasión. Los materiales escogidos para ese lujoso habitáculo adoptan, también, el compromiso de sostenibilidad y reciclaje que tanto defiende BMW. En el BMW i7 presentado, el tacto de los tejidos era de suma calidad y nada tienen que envidiar a los cueros de antaño.

El exterior también está repleto de guiños a la exclusividad y pomposidad de un coche de representación así. El frontal divide, por primera vez, sus grupos ópticos con cristales de Swarovski para la firma diurna. Una luz que te dará la bienvenida al tiempo que se iluminan unos riñones de tamaño absurdo, pero adecuado, que son totalmente ciegos en el BMW i7 eléctrico.

¿Quién lo conducirá?

Mientras el capitán de la compañía cierra sus próximos negocios, el chófer podrá gozar como un auténtico profesional de la movilidad al volante de este Serie 7. Esta generación electrificada contará con dos variantes híbridas enchufables, otras dos microhíbridas con diésel y el nombrado i7 eléctrico. Por ahora, tenemos el precio de esta última versión cero emisiones, con 137.900 euros de partida.

En este caso, hablamos de la denominación BMW i7 xDrive60, la primera que llegará al mercado español en diciembre. Tiene 544 CV de potencia (400 kW) combinada con un motor por eje de 258 CV delante y 313 CV atrás. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y alcanza los 240 km/h de velocidad punta con un peso en báscula de 2.525 kilogramos, que no está mal para todo el equipamiento y lujo que incorpora.

La batería de 101,7 kWh (capacidad neta) admite cargas de hasta 195 kW, concediendo un tiempo de espera de 34 minutos para el 10% a 80%. En tomas trifásicas alcanza los 11 kW y, se supone, que lo haría en menos de 3 horas. La autonomía prometida, en función del equipamiento, ronda entre los 590 y 625 kilómetros en ciclo WLTP.

Sentados frente al volante nos recibe la combinación BMW Curved Display, con pantalla central de 14,9 pulgadas y de instrumentación de 12,3 pulgadas. De entre todos los elementos decorativos de este salpicadero, nos quedamos con el BMW Interaction Bar, un nuevo elemento de control que se extiende e ilumina horizontalmente por toda la zona media.

Tampoco podemos pasar por alto la opción del techo Sky Lounge, con filamentos LED y muchos otros gadgets que deberemos probar para valorar su utilidad, si es que tienen alguna más allá de elevar al Serie 7 como la obra máxima de diseño e ingeniería de BMW. Una gentileza digna de ser presentada entre las paredes de un escenario de sangre azul, como es el Teatro Real que data de 1818 y fue inaugurado en 1850.