Volkswagen tuvo este martes un desliz. En Estados Unidos, la compañía, como en el resto de mercados del mundo, está preparando una gran ofensiva eléctrica y, para promocionar este movimiento, Volkswagen of America publicó en su web oficial que cambiaría su nombre en el mercado norteamericano a Voltswagen en un movimiento arriesgado, pero ambicioso y llamativo. La mayoría de medios especializados estadounidenses se hicieron eco de la noticia, pero nada fue lo que parecía.

No tardó demasiado Volkswagen a retractarse y a eliminar el contenido de su web. Poco después emitía un comunicado admitiendo que "Volkswagen no cambiará su nombre a Voltswagen. El cambio de nombre estaba preparado para ser un anuncio para el April Fool's Day". El April Fool's Day es el equivalente americano al día de los inocentes, celebrado el 1 de abril. Sin embargo, Volkswagen subió la noticia antes de hora. Lo que iba a ser un inteligente movimiento para celebrar la fecha y, de paso, promocionar sus eléctricos, terminó siendo un error.

Volkswagen se enfrenta a una férrea competencia en Estados Unidos en materia de electrificación. Los estadounidenses prefieren recurrir a Tesla o General Motors para hacer el cambio de la combustión a los coches eléctricos, marcas locales. Según declaraciones de fuentes de la firma alemana no identificadas al medio estadounidense Automotive News, hay cierta frustración interna porque sus esfuerzos en electrificación en el mercado estadounidense no han generado tanto retorno como a sus rivales.

El objetivo de Volkswagen para Estados Unidos es doblar las entregas de vehículos eléctricos. La compañía alemana invertirá 16.000 millones de euros en electrificación y digitalización para 2025, año para el que quiere vender hasta un millón de unidades de vehículos eléctricos globalmente.