Zamora y Benavente reparten más de un millón de euros del tercer premio

Diez décimos en una administración clásica de Zamora, la de "Manoli", otros diez en la de la céntrica plaza del Grano y uno vendido en terminal en un bar del Centro de Transportes benaventano.

Esos 21 boletos con el número 11.840, premiado con el tercer premio, se han llevado más de un millón de euros conjuntamente. En concreto, les han correspondido 1.050.000 euros en premios.

Y no han sido los únicos, un cuarto premio ha dejado otros 60.000 euros en tres boletos del 77.768 vendidos en Tábara, Rabanales y Zamora.

Otros 60.000 euros han correspondido a una serie de un quinto, el 37.876, despachado en el centro comercial Valderaduey y 12.000 a dos décimos de otro quinto, el 74.778, que se han ido a parar a los barrios de Los Bloques y San José Obrero. En total, 1.182.000 euros en premios mayores, una cantidad bastante modesta si se compara con los 18.485.920 euros que gastaron los zamoranos este año en el sorteo más típico de la lotería.

"Manoli", despacho ubicado en la céntrica calle Pablo Morillo de Zamora, fue en el año 2018 uno de los pioneros en dar el "gordo" de Navidad en la provincia y seis años después esta administración ha vuelto a descorchar el cava.

En esta ocasión ha sido por un tercer premio y lo ha hecho en solitario y sin revuelo porque al ser domingo no había clientes y los periodistas eran los únicos testigos de la alegría por el reparto de medio millón de euros. Un júbilo que exteriormente no visibilizaba el lotero Ángel Martín, que ha confesado que cuando los niños de San Ildefonso cantaron ese tercer premio que ha correspondido al número 11.840 él se encontraba desayunando. De hecho, el premio conocido antes de las diez de la mañana le pilló a contrapié y tardó más de una hora y media en llegar a la administración de loterías número siete de Zamora para ponerse la camiseta que le acredita como vendedor de la "medalla de bronce" del sorteo y colocar también el cartel acreditativo de este tercer premio.

El tercer premio, el 11840, es vendido en la administración número 7 de Pablo Morillo, Zamora

La administración que regenta su familia desde hace cuatro décadas vendió los diez décimos, agraciados cada uno de ellos con 50.000 euros, entre los meses de julio y agosto. En concreto, fue a las 17.44 horas del 15 de julio, cuatro días después de iniciarse la venta para el sorteo de Navidad, cuando en ventanilla despachó el primero de los boletos del tercer premio. Dos días después por la mañana vendió un segundo décimo.

Pero el mayor pellizco le correspondió a quien adquirió tres boletos de ese número el 18 de julio a las 12.14 horas, un afortunado que se llevará 150.000 euros. El resto de décimos del tercer premio los vendió los días 23 y 24 de julio y el 5 de agosto. Ese último día primero hubo una persona que a las 10.50 horas le compró uno de los décimos y a las 12.58 horas un segundo cliente le pidió los dos que le quedaban de la serie, con lo que sin saberlo entonces, se estaba llevando 100.000 euros del despacho de loterías.

Martín ha explicado que al tratarse de venta tan temprana pueden haber adquirido los billetes premiados tanto clientes que querían una terminación determinada como gente de paso que veraneaba en Zamora y adquiría un décimo o llevaba otros para repartir a familiares.

Por el momento, ninguno de los agraciados se ha puesto en contacto con este lotero al que la suerte ha vuelto a sonreír seis años después de dar "el gordo".

El 11.840 también ha sonreído a Benavente. El tercer premio del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad ha sido repartido en la Administración número 1 de la ciudad benaventana, situada en la plaza del Grano, 5. Como han explicado sus responsables, han repartido una serie, es decir, "diez décimos, un total de 500.000 euros". La noticia ha sido recibida por teléfono, pero también en directo: "Ha empezado a llamar todo el mundo" (...) "Yo lo estaba viendo en directo, actualicé y cuando vi que éramos nosotras como loca me puse a llamarlas, no me lo podía creer".

VÍDEO | Celebración en la Administración número 1 de Benavente por haber repartido el tercer premio

Se desconoce quiénes son los afortunados, pues han confesado que los primeros décimos comenzaron a venderse en el mes de agosto, aunque los últimos boletos han sido comprados esta semana por ventanilla. "Alguna vez nos tenía que tocar, que toque en Zamora y Benavente", han comentado con alegría. No obstante, en 2020 en esta administración ya repartieron un quinto premio.

Desde la plaza del Grano esperan que este premio atraiga a más clientes en un futuro. A esos diez décimos hay que añadir un boleto de 20 euros (premiado con 50.000) vendido a través de terminal en el bar "El Polígono" de Benavente. Sus propietarios han mostrado su júbilo y han brindado con cava para celebrar que la suerte les ha sonreído en el primer año que regentan el negocio hostelero.

Eso es llegar y besar el santo. Y no ha sido el único caso, ya que en la capital zamorana le ha ocurrido lo mismo a Nerea, la propietaria del bar "El Chispa". Ella está al frente del establecimiento hostelero de la avenida de Galicia, en el barrio de San José Obrero, desde hace años, pero ha sido este año 2024 cuando se ha animado a instalar también en él una terminal de venta de Loterías y Apuestas del Estado. Se trataba de su primer sorteo de Navidad y, aunque no ha sido mucho, el boleto del número 74.778, ha dado la alegría y 6.000 euros de premio a uno de sus clientes que, sin duda, va a pasar algo mejor la Navidad.

Otro boleto de ese mismo número e idéntico premio se ha despachado, también por terminal, en el estanco de la calle Polvorín, en el barrio de Los Bloques, junto a la comisaría de la Policía Nacional.

Se trataba igualmente de la primera vez que daba uno de los grandes premios del sorteo de Navidad, algo para lo que su propietario ha tenido que esperar nada menos que 20 años desde que comenzó a vender boletos en el estanco boletos a través de la máquina de Loterías y Apuestas del Estado. Quien ya sabe bien lo que es dar grandes premios el 22 de diciembre es la lotera de "La Abeja" de la calle Renova, junto a la Plaza Mayor de Zamora.

En esta ocasión ha sido un décimo del cuarto premio, que ha recaído igualmente en un número con tres sietes y acabado en ocho, el 77.768. El comprador de ese boleto vendido por máquina se llevará 20.000 euros, una cantidad que le permitirá pasar unas Navidades a lo grande. Sin dejar la capital, en el centro comercial Valderaduey también ha habido cava preparado, dispuesto a descorcharse cuando apareciera algún ganador. Su administración de loterías ha abierto por si aparecían los agraciados con el quinto que han repartido. Fue el premio más madrugador que salió del bombo, correspondiente al número 37.876, del que se vendieron diez décimos en el centro comercial Valderaduey, lo que suma una cuantía de 60.000 euros. El lotero Alberto González ha explicado que se trata de uno de los números "salpicados", de los que reciben una sola serie que venden en ventanilla.

Ha indicado que ese tipo de billetes suelen despacharse en los primeros meses, por lo que podría haberse repartido en verano, pero tampoco puede asegurarlo. "Es impredecible saberlo", ha zanjado. A él le gustaría que los premiados sean de Zamora, aunque en ese centro comercial compran también bastantes personas llegadas de fuera.

El centro comercial Valderaduey de Zamora, con el cava preparado por el quinto premio

Lo cierto es que, zamoranos o foráneos, los agraciados recordarán siempre este 22 de diciembre como un día de inmensa alegría. A los demás, nos queda la salud.

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