Es solo un 1,07% más que en septiembre de 2020, pero el número de alumnos zamoranos que este mes se ha incorporado a las aulas se ha incrementado hasta llegar a los 19.618 estudiantes. Los aumentos en el resto de provincias de Castilla y León han sido en un porcentaje similar, siendo el más alto en Salamanca, con un 1,91% más. En total, los alumnos de Castilla y León pasan de los 341.755 del curso 2020-2021 a los 345.704 de este septiembre.

Alumnos entrando al instituto en su primer día. | Emilio Fraile

Los primeros en volver a clase el pasado 10 de septiembre fueron los más pequeños —de Infantil, Primaria y Educación Especial—, que en Zamora alcanzan los 9.866 niños, del total de 174.926 en la región. Una vez más, la Junta cumplió con el medio rural y mantiene aulas con tan solo tres y cuatro alumnos, una y dos en Zamora, respectivamente, y un total de 12 y 15 en la región. De hecho, la Dirección Provincial de Educación anunciaba que se recuperaba para este curso el centro escolar de Castroverde de Campos, que cerró el pasado año. Así, se une al mantenimiento de los colegios de Peleas de Arriba, Villardeciervos y Fariza, aunque, en el otro lado, se restan las aulas de Villalba de la Lampreana y Villamor, por falta de alumnos.

Una de las novedades de este curso en Zamora se encuentra en los nuevos grados de Formación Profesional que se podrán estudiar en la provincia, de ámbitos tan distintos como salud, tiempo libre, informática y alimentación. Se trata de los estudios de Atención a Personas en Situación de Dependencia (CIFP Ciudad de Zamora), Desarrollo de Aplicaciones Web (IES Claudio Moyano), Guía en el Medio Natural y de Tiempo Libre (IES Valverde de Lucerna) y Elaboración de Productos Alimenticios (IES Alfonso IX).

Un profesor despide a una madre y su hijo. | J. Luis Fernández

Con respecto a la inversión en obras para este curso en Zamora, destaca sobre todas ellas —siendo una de las más importante de Castilla y León— el proyecto del Conservatorio Profesional de Música, que tiene previsto un desembolso por parte de la administración regional de más de 15,5 millones de euros. De momento, en este curso se destinarán 1.950.670 euros. El colegio Arias Gonzalo en la capital, el CRA Tierra del Pan en Valcabado y el IES Los Sauces de Benavente son otros de los edificios que recibirán inversión para obra nueva.

Niños en su primer día de clase en el aula. | Jose Luis Fernández

La consejera de Educación, Rocío Lucas, presentó a principios de mes las líneas maestras de este nuevo curso, que arrancaba con mayor certidumbre y avalado por la experiencia positiva del anterior y con la celebración de extraescolares como principal novedad.

El profesor, con mascarilla en clase. | Jose Luis Fernández

La protección de la comunidad educativa es el pilar sobre el que se asienta toda la organización. Lucas destacó en la presentación, que el Gobierno Mañueco, “ya en junio, apostó por mantener la máxima seguridad para el curso escolar 2021-2022. Y la evolución de la pandemia, con su quinta ola, nos ha dado la razón”. Así, los alumnos en Castilla y León mantendrán la distancia de seguridad de 1,5 metros, mientras que en otras muchas autonomías han optado por flexibilizar esta distancia hasta el 1,2 o incluso menos. “Hemos querido ser más ambiciosos e ir más lejos que otros, en ese afán por garantizar presencialidad, calidad educativa y seguridad”, enumeró.

Un grupo de niños juega en el patio del centro escolar. | Jose Luis Fernández

Por otra parte, señaló que, teniendo en cuenta la vacunación de los mayores de 12 años, a medida que mejore la situación epidemiológica se podrán flexibilizar algunos aspectos, como el uso de mascarilla, que en principio será obligatoria en todo el recinto para los escolares que cumplan seis años.

Los pequeños alumnos esperan ordenadamente y con distancia junto a sus mochilas a la apertura de las puertas del colegio. | Jose Luis Fernández

Para alcanzar esta seguridad, la Junta de Castilla y León ha puesto todos los recursos necesarios para que se mantenga la distancia, además de los docentes necesarios para los desdobles de aulas —2.242 en Zamora— a los que obliga la separación de metro y medio entre alumnos y se reduce, aún más que el curso anterior, el horario lectivo de los profesores que forman parte de los equipos COVID de cada centro. Por último, también se ha reforzado la limpieza, con un coste de 5,2 millones de euros y 1,9 millones más en ayudas a las entidades locales.

Septiembre con la vuelta a la rutina escolar