El medio ambiente como compromiso en el aula fue el motor del proyecto "VSCO Week" que desarrollaron los alumnos de 5º y 6º de Primaria del colegio Santísima Trinidad-Amor de Dios, dentro de una iniciativa más global, denominada "Los guardines del Duero". Los propios estudiantes idearon una serie de tareas, acciones y compromisos relacionados directamente con el cuidado de la naturaleza, en los que implicaron a toda la comunidad educativa.

Inspirado en el término "VSCO", que define a la generación Z comprometida con el medio ambiente, se convirtió en un buen punto de partida para iniciar la fase activa de concienciación, con los propios alumnos encargados del control, la medida y la gestión de los recursos asociados a la prevención y adaptación al cambio climático; la eficiencia energética y energías renovables; agricultura ecológica; agua; ahorro y gestión; aire: calidad y movilidad; entorno acústico; residuos: prevención, reutilización y reciclaje; consumo y sostenibilidad.

Fue una quincena muy intensa, con más de 300 alumnos concienciando a sus familias de la necesidad de conseguir el objetivo principal de la Cumbre del Clima celebrada en Madrid el pasado diciembre: no alcanzar los dos grados de subida de la temperatura del planeta y conseguir mantener el límite del calentamiento global en los 1,5 grados.

Las actividades pasaron desde una campaña de reciclaje de pequeños electrodomésticos denominada "Otro final es posible" hasta una lista de compromisos con la sostenibilidad en "No arruines la Tierra, es difícil encontrar un planeta mejor". Saliendo al patio con la máxima de "residuos cero" o participando en la tradicional "Operación Kilo", con el propósito de potenciar el consumo responsable en las tiendas del barrio o colaborando con el proyecto "Libera Basuraleza", además de un seminario de formación a cargo de la Asociación de Jóvenes Emprendedores de Zamora (AJE) se logró que "durante una quincena, en el centro se haya respirado solidaridad y compromiso en cada rincón", apunta el profesor Luis de Mena.

Fue tras Navidad cuando se pasó una encuesta de evaluación y satisfacción entre los alumnos, que ha sido después analizada por los representantes de "Los guardianes del Duero" para definir la hoja de ruta del programa de educación ambiental que se desarrollará durante el próximo curso 2020-2021 "para la consecución del sello ambiental de Centro Educativo Sostenible por la Junta de Castilla y León", adelanta el docente.

Los resultados apuntan a que más del 78% de los alumnos considera que la adopción de medidas para la protección del medio ambiente ha de ser "inmediata", aunque el 51% reconoce "estar concienciado, pero no actuar en consecuencia con las necesidades actuales de emergencia climática". Además, el 12% de los encuestados manifiesta que su actitud respecto al mantenimiento y sostenibilidad de su entorno más inmediato -como instalaciones del colegio, uso de las papeleras del barrio de Pinilla, educación vial o respeto por los parques y jardines- "necesita mejorar".

La encuesta también ha servido para conocer mejor a los alumnos del centro. Un 25% nunca consume fruta en el recreo, un 70% opta por botellas de plástico en vez de aluminio o vidrio, un 33,3% considera que su aula es ruidosa y un 40% reconoce usar el plástico o papel de aluminio para envolver su almuerzo. Además, el 97% desearía tener un huerto escolar, el 78,2% le pediría al Ayuntamiento la posibilidad de adaptar medidas para disminuir la contaminación y un 65% considera que las zonas verdes comunes cercanas al colegio podrían mejorar tanto su estado como la limpieza.

"Este proyecto común para todo el centro ha permitido que el alumnado sea el auténtico protagonista de la aventura de aprender, basada en proyectos que tiene como objetivo potenciar las competencias clave del currículo escolar a través de la investigación y que, sin lugar a dudas, ha superado las expectativas de profesores", valora de Mena.