"Derribar muros" es el objetivo principal del proyecto "Museo Okupado", una iniciativa auspiciada por el Museo Baltasar Lobo y la Escuela de Magisterio de Zamora para acercar la figura y la obra de este artista a los más pequeños. La ruptura de los muros del museo y los centros escolares -comenzando por el colegio Arias Gonzalo- sirve para crear conocimiento de un espacio no formal, como es el museo, al formal, que es el centro escolar. De esta manera, "sus salas se convierten en un lugar de aprendizaje, además de contemplación y placer estético. Y el centro escolar, a través de la intervención artística, se transforma en museo, donde la comunidad ciudadana del entorno puede disfrutar del placer estético a través de lo expositivo", explican los promotores del proyecto educativo desde la Escuela de Magisterio.

La "excusa" fue en principio adecentar las paredes de uno de los patios del colegio Arias Gonzalo. La idea fue creciendo y desarrollándose hasta convertirse en algo mucho más ambicioso. Y es que intervenir en ese muro para crear algo en él guiados por un artista del entorno inmediato "es un proyecto en comunidad de aprendizaje de carácter intergeneracional colaborativo en torno al arte contemporáneo, innovando a través de una acción activa ciudadana".

Representantes de la Junta de Castilla y León, Dirección Provincial de Educación y Ayuntamiento se acercaron incluso a disfrutar de la actividad con la se inauguraba la nueva decoración del patio, en la que no solo se vieron los murales inspirados en la obra de Lobo, sino que se convirtió en una auténtica jornada lúdica y educativa, donde los escolares mostraron los resultados de sus conocimientos sobre Lobo, en forma tanto de esculturas como de expresión corporal, tras ser guiados por los alumnos de Magisterio y el profesor Miguel Elías.

El proyecto contiene un fuerte componente educativo innovador, cuyo fin es "habitar el aprendizaje, creando espacios más adecuados y más estéticos, donde los estudiantes aprendan más y mejor, y sientan cómo su comunidad educativa inmediata y cercana se siente responsable de su educación y no solo sus padres y profesores".

Una de las últimas actividades de este proyecto no concluido, puesto que se encuentra en continuo desarrollo, fue realizada a finales del pasado curso por los alumnos de Magisterio, que se desplazaron hasta el propio museo del artista de Cerecinos de Campos para acercar su obra a niños de 5º y 6º de Primaria del Arias Gonzalo, tanto en las diferentes salas como en los jardines del Castillo, donde también están instaladas varias piezas. "El objetivo era primero que los niños se interesaran por un museo como este que tenemos en Zamora y que es una maravilla. Por otro lado, los estudiantes podían imaginarse como escultores y descubrir lo que significa pasar a la historia dejando esta gran obra", resume el profesor de Magisterio Galo Sánchez.

Esta actividad también sirvió para que los futuros maestros pudieran ejercer su futura profesión. Una práctica que se desarrolló primero en las aulas de la escuela, donde elaboraron las diferentes acciones que realizarían con los niños, y más tarde junto a las esculturas de Lobo. Con ello, se consigue un trabajo recíproco entre los dos grupos de participantes.

Por otra parte, el programa también proporciona una interesante reflexión sobre "el impacto que el museo de arte contemporáneo puede tener como agente no solo turístico y económico, sino también educativo, en los ciudadanos que lo visitan. Pero, sobre todo, en la comunidad de ciudadanos del propio entorno que lo rodea", reflexionan desde la Escuela de Magisterio.

En este curso que acaba de comenzar la idea es continuar creciendo y elaborar una guía didáctica, en la que colaborará el propio Ayuntamiento de Zamora. Con ella se tendrá ya un manual educativo para abarcar diferentes grupos de escolares. Además, se implicará también la propia Universidad de la Experiencia de la USAL, cuyos alumnos podrían convertirse en colaboradores. "La idea es que sea un proyecto que se vaya haciendo poco a poco, año tras año, hasta que lleguemos a un punto donde podamos decir que ya está redondo", vaticina Sánchez sobre un proyecto de innovación docente donde han colaborado desde el Área de Didácticas Específicas, Expresión Musical y Corporal de la Escuela de Magisterio, hasta la directiva y ampa del colegio Arias Gonzalo, pasando por el propio Museo Baltasar Lobo, la Dirección Provincial de Educación y el Ayuntamiento.