Con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer de Mama que se celebra el próximo 19 de octubre, LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA ha organizado una jornada online en la que participarán varios expertos. El evento cuenta con la colaboración de la Asociación Española Contra el Cáncer y el patrocinio del Ayuntamiento de Zamora, el Hospital Recoletas y la Fundación Caja Rural de Zamora.

Feliciano Ferrero, secretario de la Fundación Caja Rural, explica en esta entrevista las novedades del evento y los efectos que ha tenido la pandemia en la actividad que desarrolla la entidad.

–¿En qué va a consistir la jornada del 19 de octubre?

–El día 19 de octubre es el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama y, como es tradicional, organizamos esta jornada como recordatorio de esta problemática, de que el cáncer de mama está ahí y de que no debemos bajar la guardia. Como todo el mundo sabe, es muy importante la prevención y la detección temprana. Cogido a tiempo, un cáncer de mama es un problema subsanable en muchos de los casos, pero hay que estar vigilantes. Cuanto antes se detecte, mejor y más posibilidades hay de curación.

–¿Qué se pretende con esta jornada?

–Es una jornada de divulgación y de información a la ciudadanía de lo que es el cáncer de mama, de la problemática que tiene y de las posibilidades que hay de curación. Hay que incidir en que cuanto antes se detecte cualquier tipo de cáncer, más posibilidades hay de curación.

–Un año más este evento recibe el apoyo de la Fundación Caja Rural de Zamora...

–Sí, el lema de la Fundación es difundir valores, difundir información. Qué mejor forma de hacerlo que con esta jornada que es apoyada por el periódico LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, la Asociación Española Contra el Cáncer y el Hospital Recoletas de Zamora para difundir información sobre este tema a toda la sociedad zamorana.

–Debido a la pandemia de coronavirus, el evento será online, ¿cree que puede suponer algún problema para que los zamoranos participen?

–Una jornada online no es lo mismo que una conferencia presencial lógicamente, pero esperamos que al ser online y poder acceder a través de las nuevas tecnologías, la gente joven se anime a participar más que otros años. Somos conscientes de que las personas mayores van a tener más problemas para seguir el evento, pero creo que es una buena ocasión para que la gente joven pueda seguirlo y conozca este tipo de tumor y los condicionantes que tiene el cáncer de mama. Aprovechar Internet y las redes sociales para la difusión de esta mesa redonda es bueno y ojalá los jóvenes participen.

–La mesa redonda contará con profesionales médicos, de enfermería y de psicología, ¿es interesante tener todas esas visiones?

–Sí, porque se ve la enfermedad desde distintos puntos de vista. Creo que estos profesionales son las personas que mejor pueden definir y hablar sobre el tema porque están en contacto directo con los afectados, con las personas que están sufriendo el cáncer de mama. Por este motivo, pueden aportarnos una visión importante tanto sobre la prevención inicial como sobre las pautas posteriores que hay que seguir una vez detectado el tumor. Nos pueden hablar de qué es lo que se puede hacer y qué perspectivas de curación hay.

–¿Son bien recibidas estas jornadas por los zamoranos?

–Sí, hay varios temas que son especialmente bien recibidos por la gente de Zamora y uno de ellos es todo el tema del cáncer en general y el cáncer de mama en particular. El cáncer de mama lo hemos tratado muchas veces tanto en estas jornadas como desde la Fundación en nuestras jornadas de información saludable. Otros temas de la salud que interesan de forma especial son los problemas cardíacos, que siempre han tenido un éxito fabuloso, y también los problemas reumáticos, la salud mental y la salud visual.

–Con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, ¿qué mensaje se puede transmitir sobre este tumor que es tan frecuente?

–En este sentido, soy muy optimista. Con la Fundación Caja Rural llevamos 23 años organizando jornadas sobre el cáncer de mama. En los inicios, las expectativas y las perspectivas que nos daban los médicos no tienen nada que ver con las actuales. Ahora mismo, un cáncer de mama detectado en una etapa temprana prácticamente es curable y las expectativas son buenas. Ante todo, lo que quiero transmitir es un mensaje de confianza en la parte sanitaria porque tenemos profesionales muy especializados, muy profesionalizados y con unas garantías fabulosas.

–¿Cómo ha afectado la pandemia de coronavirus a la actividad de la Fundación Caja Rural de Zamora?

–Ha afectado de una forma muy importante porque se ha cancelado prácticamente toda la actividad y todas las conferencias divulgativas que teníamos programadas desde el mes de febrero. Habíamos aplazado las jornadas de marzo y abril y las habíamos pospuesto para octubre y noviembre, pero hemos tenido que suspenderlas de nuevo por la situación sanitaria. Dentro de la actividad propia de la Fundación, estamos trabajando con la Asociación de Panaderos de Zamora en la Cocina Solidaria, una iniciativa de la que se están beneficiando 90 familias. Francamente, la situación está muy complicada, las necesidades cada vez son mayores y, dentro de nuestras posibilidades, intentamos paliar un poco esa carencia.

–¿En qué consiste la iniciativa de la Cocina Solidaria?

–La cocina está en el barrio de San Lázaro. Hemos alquilado un bar que estaba cerrado, se ha montado la cocina y desde ahí se distribuye la comida a las personas beneficiarias a través de las asociaciones de vecinos. Hay personas contratadas y voluntarios que se encargan de llevar las comidas a la asociación de vecinos y los usuarios o bien la recogen en las sedes de las asociaciones o si son personas mayores o con problemas de movilidad, la propia asociación se lo lleva a su casa. La verdad es que la Cocina Solidaria está funcionando bien, la gente está muy contenta y vamos a ver cómo podemos ir paliando toda esta problemática.

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–Esta labor en esta época de pandemia será importante...

–Claro, por eso nos lanzamos a crear y lanzar esta iniciativa porque estábamos detectando que había mucha gente joven pasando muchas carencias por necesidades económicas, pero también hay personas muy mayores con pocos medios económicos, a las que salir a comprar y preparar la comida les resulta complicado. Tratamos de echarles una mano en este sentido.