Definitivamente, Miley Cyrus quiere despojarse de esa imagen de niña buena que nunca ha roto un plato. Empezó siendo la adorable Hannah Montana y ahora se ha convertido en una adolescente rebelde. A sus 17 años, la actriz sólo quiere salir de marcha, incluso los domingos, y esta vez lo ha hecho acompañada de su íntima amiga Ashley Greene.

La superestrella, que es cantante y actriz a la vez, se fue de marcha parisina el pasado domingo por la noche con su amiga y compañera de reparto en LOL: Laughing Out Loud y también actriz de la exitosa saga Crepúsculo, Ashley Greene.

Según han publicado en RadarOnline, ambas eligieron el prestigioso VIP Room de París donde fueron tratadas de manera exclusiva y especial durante toda la noche. Además, dicen que Miley se estuvo divirtiendo con el Dj Ruckus hasta altas horas de la madrugada.

Cyrus confesó hace poco que había cambiado "un montón" desde la primera vez que alcanzó la fama interpretando al personaje de Disney, Hannah Montana: "Yo creo que definitivamente he cambiado un montón. Cuando llegué por primera vez al rodaje, tenía a mi madre al lado".

"Ella era mi asistente, mi maquilladora, mi peluquera y mi estilista, todo en uno", explicó la actriz. "Me acuerdo de ir a trabajar totalmente maquillada y ahora vamos en pijama", añadió.

Y es que, en definitiva, Miley Cyrus se encuentra "mucho más cómoda" con su nuevo yo y no necesita sentir que tiene que ir súper bien vestida y presentable todo el día. "Esto es como estar en casa para nosotros", sentenció.