Catherine Zeta-Jones está muy enfadada. La actriz ha hablado, por primera vez, del cáncer de garganta que sufre su marido Michael Douglas. La galesa ha insistido a la revista estadounidense People en que está "furiosa" con los médicos que trataron al actor por no haber detectado el tumor antes.

Hace un mes, Michael Douglas anunciaba la terrible noticia de que tenía que luchar contra un cáncer de garganta y en su primera entrevista tras el diagnóstico, hace unos días, el actor desveló que fue sometido a un sinfín de pruebas por diferentes médicos pero ninguno fue capaz de dar con el tumor.

A la vuelta de sus vacaciones, le recibieron con la mala noticia de que padecía cáncer y bastante avanzado, nivel cuatro, y agresivo. Esto es justamente lo que Catherine está tratando de superar. La actriz quiere perdonar a los médicos y olvidar que infravaloraron el dolor de garganta que sentía su marido en un principio.

"Me pone furiosa que no lo detectaran pronto. Él pidió que barajaran cualquier opción pero no encontraron nada... No fue un gran shock. Yo sabía qué algo no iba bien, él sabía que algo iba mal", dijo Zeta-Jones a la revista estadounidense People haciendo las primeras declaraciones sobre la enfermedad de Douglas.

Además, la galesa también admitió que está intentando mantenerse "fuerte" por su marido pero "sé que quizá tendría que ser más fuerte pero, emocionalmente, no quiero verlo. Lo más duro es ver cómo se fatiga porque Michael nunca está cansado. Si hay algo que a Michael le sobra es fuerza".

Otra de las peores partes fue cuando el legendario actor tuvo que explicarles a sus hijos, Dylan, de 10 años, y Carys, de 7, la enfermedad que le acababan de descubrir. Catherine asegura que: "Papi les sentó" y directamente "les dijo que tenía cáncer".