Un grupo de aguederas del barrio de San Lázaro se han encargado durante toda la jornada, de amenizar las calles del centro de Zamora con sus vistosos trajes típicos y los cánticos tradicionales con letras picantes. No han sido este año tantas como en otras ocasiones, por aquello de que la pandemia sigue haciendo estragos, pero las águedas no han faltado a su cita.

Un buen grupo de ellas compartieron además mesa y mantel en torno a la comida de hermandad en un restaurante cercano a la Plaza Mayor.