El frío empieza a apretar y al llegar a casa ya empiezan a notarse las bajas temperaturas. Por eso, en estos días son muchos los que ya están encendiendo la calefacción en sus hogares. Con este acto llega una consecuencia directa, que es el incremento en el gasto y en las correspondientes facturas. No obstante, existen una serie de recomendaciones que te ayudarán a reducir el gasto generado en calefacción.

Mantener una temperatura adecuada en casa

Las fuertes subidas de temperaturas provocan que se suba la temperatura de la calefacción más de lo necesario. Sin embargo, los expertos aseguran que para calentar un hogar es suficiente con encender la caldera a 21 grados.

Programar el encendido

Si solo vas a estar en casa un par de horas al día, la mejor opción es programar el encendido para antes de llegar, lo que te permitirá tener tu hogar en la temperatura adecuada sin gastar de más.

No cubrir los radiadores

Colocar un mueble demasiado cerca o poner ropa húmeda encima para que se seque más rápido no es recomendable si lo que buscas es sacar el máximo partido a tu calefacción. El consumo será mayor y también la factura.

Apagar la calefacción por la noche

Salvo en casos de frío extremo, mantener la calefacción encendida por la noche solo aumentará el gasto en energía de manera considerable. Por ello, se recomienda apagarla antes de irse a dormir, ya que se permanecerá arropado en la cama.

Revisar los aislamientos

Entre el 25% y el 30% de las necesidades de calefacción de un hogar se deben a pérdidas de calor que se originan en las ventanas. Por ello, es necesario comprobar que la vivienda cuenta con sistemas de aislamiento adecuados que no dejen entrar el frío.

Un buen mantenimiento de la caldera

Un buen mantenimiento permitirá que la caldera funcione con el máximo rendimiento y evitará que se produzcan problemas importantes en el futuro. Algunas compañías incluyen en el contrato el servicio de mantenimiento de forma gratuita, recuerda realizarlo una vez al año para evitar sorpresas.