Miles de personas abarrotaron el pasado sábado la plaza Sagasta con motivo del "Beséame" 2018. Gracias a Valenciana Shock, Zamora volvió a convertirse en la capital del amor en una jornada en la que reinaron los besos y la música. Bailarines de break dance y twerking calentaron la tarde con un campeonato exhibición en el parque de La Marina, donde arrancó la popular macrobatukada. La formación, principal novedad de esta quinta edición, arrastró a los viandantes a golpe de percusión hasta la plaza Sagasta, epicentro de la fiesta. Allí, una vez caída la noche, miles de personas dieron rienda suelta a su amor a base de besos. La música, la animación, la suelta de 2.000 globos y el reparto de helados y disparadores de confeti envolvieron un singular evento marcado por el derroche de cariño que ya se ha hecho un hueco en la programación de las Ferias y Fiestas de San Pedro.