El cantante Sergio Dalma actuará el próximo sábado, día 23 de junio acompañado por su banda habitual, en el auditorio Ruta de la Plata dentro de las ferias y fiestas de San Pedro.

-Este concierto supone la tercera actuación del artista en la ciudad y parece que el número tres está unido a usted porque viene a presentar "Vía Dalma III".

-Además el tres es mi número de la suerte (risas). Cuando saqué "Vía Dalma" pensaba que se iba a quedar en un álbum con el que quería hacer un homenaje a la música italiana. El público pidió un segundo disco, aunque yo era reticente de hacerlo. Al final se grabó con muchísimo éxito y finalmente ha habido un tercer disco. Me gustaría que esta trilogía se quedara aquí porque tengo ganas de disfrutar de esta gira, de luego preparar algo especial porque celebrar mi 30 aniversario, de sumergirme en otros proyectos...

-Pero la música italiana siempre ha estado unida a su trayectoria.

-Incluso cuando saqué "Esta chica es mía" pensaban que era otro italiano cantando en español. Siempre ha quedado muy clara mi influencia y he disfrutado mucho haciendo estos tres discos, han sido proyecto muy divertidos, pero Sergio Dalma es mucho más. Tengo una trayectoria muy amplia detrás de casi 18 discos.

-¿Qué tiene la música italiana para que el público quiera volver a escuchar temas de décadas atrás?

-España siempre ha sido muy consumidora de la música italiana. Hubo una época en la que la canción que ganaba en el Festival de San Remo a la semana sonaba en la radio en España en castellano. Muchos italianos han venido a promocionar su música. Siempre nos han atraído esas melodías y nos ha atraído ese glamour que conlleva la moda italiana y la forma de hacer de allá.

-Lo más complicado de hacer de uno una composición cantada por otro?

-La verdad es que los temas presentes en "Vía Dalma" son hits reconocibles en todo el mundo. De "Volare", de Domenico Modugno, se han hecho infinidad de versiones que tú tienes en la cabeza y de las que tienes que huir para darle tu personalidad. Lo que tienes que hacer es probarla en el estudio y buscar tu sello. En el caso de esta canción le dimos un toque de swing. Cuando estaba en el estudio mi obsesión era que sonara Dalma porque no quería hacer unos covers, sino que pudieran sonar como canciones mías, tal y como pasó con el primer disco de la trilogía que al escucharlo muchos jóvenes pensaron que eran temas míos.

-¿Alguna pieza se ha resistido al toque Dalma?

-Sí. Algunas yo mismo prescindí de ellas porque no notaba que tuvieran la misma fuerza que otras, pese a que yo tenía muchas esperanzas en ellas, y otras se han quedado en el cajón sencillamente porque no había sitio para más.

-En el concierto de Zamora además de los temas que integran este disco también repasará su amplia trayectoria.

-Por supuesto. Eso es lo que estamos haciendo desde que comenzamos esta gira el pasado 20 de enero. En los conciertos invitamos a que la gente transite por esa "Vía Dalma" tan amplia y luego recordamos las canciones de siempre con otro sonido, con otra manera de ser interpretadas y de sentirlas. Son canciones que forman mi ADN, que son mi columna vertebral y que no pueden faltar en mis actuaciones. Este será un concierto que tendrá momentos muy intimistas y nostálgicos y otros, en los que vamos a intentar que la gente se ponga de pie, baile y disfruta porque, al final, cuando uno paga una entrada tiene que disfrutarlo a su manera.

-Habla de sus temas de toda la vida, pero con otro sonido. ¿Hay que reinventarse para seguir siendo una referencia en el ámbito musical?

-Sí totalmente. El reinventarse, el evolucionar, el arriesgar es clave. Hay que alejarse de la zona de confort porque el público quiere que le des cosas nuevas. Uno tiene que asumir retos y desafíos porque es lo que te da esa ilusión por seguir subiéndote al escenario y por preparar un nuevo proyecto. Yo hubiera podido vivir de "Bailar pegados" durante toda mi vida, pero me resultaría muy aburrido. Tras ese disco muchos autores me decían que tenían una canción similar y sin embargo, yo quería hacer temas distintos.

-Todavía se le asocia con este tema para bien o para mal.

-Es una canción muy especial para mí. Siempre voy a recordar con un cariño muy especial mi paso por Eurovisión, un festival muy diferente al de ahora. Es un tema que se recuerda y que ha pasado de una generación a otra, algo que es mágico e imposible de conseguirse otra vez. A día de hoy todavía me pregunto cómo se ha logrado. En mis conciertos veo cantarla a jóvenes que no habían nacido en aquel entonces. Son de las cosas que no sabes por qué ocurren y que tengo la suerte de que me ha pasado a mí.

-¿Suele seguir Eurovisión?

-Siempre que puedo sí, pero un festival que no tenga una banda, una orquesta en directo... me rompe los esquemas. Suelo seguir el Festival de San Remo y el de Viña del Mar, que es una plataforma muy completa. Eurovisión ha cambiado mucho, ahora es un espectáculo visual.

-Operación Triunfo ha regresado y ha creado un fenómeno alrededor. ¿Cómo lo ve?

-Me alegro mucho que haya renacido. Ha sido un fenómeno en las redes sociales gracias a la gente joven. Además, este año al salir de OT Alfred y Amaia muchos jóvenes siguieron también el festival. Estos dos cantantes están muy preparados y son competentes. Cuando uno tiene talento, en algún momento, debe de aflorar y si es a través de un programa como Operación Triunfo, bienvenido sea. El que salgan cantantes tan buenos augura un buen futuro a la música.

-¿Qué radiografía efectúa del sector en España?

-No se venden discos porque la sociedad ha cambiado. No obstante, la sociedad consume más música que nunca, pero a través de las plataformas y de los canales de YouTube. Hemos conseguido que la gente pague una entrada por acudir a los conciertos, algo impensable hace años.

-¿Le pediría al nuevo ministro de Cultura y Deportes, José Guirao, la bajada del IVA en la música?

-A cualquier persona que ocupe la cartera le pediría que escuche a quienes nos dedicamos al mundo de la cultura porque siempre hemos tenido la sensación de que se nos ha dejado de lado y le pediría la bajada de IVA para la música porque nos ha hecho mucho daño.

-Muchas nuevas voces saltan a la fama a través de vídeos colgados en Internet. ¿Qué le parece?

-Si alguien tiene madera de artista es importante que se conozca, pero en este país si te toca la lotería entre las cosas que tal vez hagas sea grabar un disco. Son cosas que pasan solo en España. (Risas). Siempre ha habido mucho intrusismo profesional, pero el público es muy exigente y es el que elige.

-Cuando escucha Sanabria, ¿qué siente Sergio Dalma?

-(Breve silencio y se ríe). Siento algo por dentro porque es una relación de muchos años, desde que tuve la oportunidad de descubrir esa tierra porque los padres de un compañero de trabajo de hace unos 20 años tenían una casa en la comarca, me llevó y me sedujo la comarca. Es un lugar entrañable, que me da paz y que se ha convertido en mi refugio y en el lugar donde cargo las pilas, donde preparo los proyectos y donde, sobre todo, siento que soy uno más. He descubriendo la magia de sus paisajes, de la berrea, que me chifla, y he descubierto a sus gentes que me han hecho sentir como en casa, lo que siempre he valorado mucho. En Sanabria siempre me he sentido como en casa y me siento un sanabrés de adopción. Creo que la provincia de Zamora cada vez es un poco más conocida gracias a que Puebla fue considerado uno de los pueblos más bonitos de España, que el Lago cada año atrae a mucha más gente y yo también me he encargado de pregonar sus maravillas (risas). Tengo la sensación de que todavía la gente no conoce la provincia de Zamora que es un lugar que hay que descubrir.

-Siente Sanabria como su tierra de adopción, pero su tierra de origen es Cataluña. ¿Cómo vive la situación existente en ella?

-Ahora un poco mejor, más esperanzado, pero sin tirar las campanas al vuelo porque es una situación muy complicada. Lo vives con impotencia y desencanto porque ves que los políticos no han llegado a entenderse. Ha faltado el diálogo y se ha ido de las manos de un lado y de otro.