A Amando Hernández las copas casi no le caben ya en casa, después de haber ganado un montón de galardones en la Feria del Ajo bien por las ristras o por los montones. Ayer subía un par de veces al escenario del recinto feria a recoger los premios ganados en este caso por su hijo, Gustavo Hernández Herrero, de Cuelgamures.

- ¿Cuántos premios llevan en la familia en la Feria del Ajo?

-No se. Primeros puestos en las riestras y montones, muchos, no le se decir el número.

- Necesitará un mueble especial para tanto trofeo.

-Los tengo repartidos por toda la casa, en una vitrina tengo unos, en otro lugar, otros, no he tenido todavía ese detalle, pero algún día quizá lo haga.

-¿Qué le sigue atrayendo de estos premios?

-Tengo el recuerdo de cuando venía con mi padre, que se dormía en el suelo, el gusanillo de venir. Pero ya van pasando los años y hay que pasar el testigo a la gente más joven, aunque va a ser difícil que continúen porque esto es muy costoso. Con la cosa de no perder la tradición siempre tienes esa idea, aunque seguramente habrá que irlo dejando.

- ¿Cómo ha visto este año la Feria del Ajo?

-Ajos ha habido bastante y también las ventas han sido buenas, con unos precios similares a los del año pasado.

- ¿Habría que subir el precio?

-A la gente si en vez de decirle a cinco le dices a siete, se lo piensa. Entiendo que cobrando lo que compensa tu trabajo está bien.