La física zamorana Rosario Heras ha recibido el Premio eWoman 2020 a la Trayectoria Profesional. La galardonada ha sido una pionera en Europa en la investigación sobre eficiencia energética en edificios y ha contribuido durante toda su carrera al desarrollo de proyectos de energía sostenible a nivel nacional e internacional.

Desde mayo es investigadora emérita del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas, el Ciemat.

Rosario Heras se licenció en Físicas en 1975 en la Universidad Complutense de Madrid y un año después comenzó a trabajar como profesor no numerario en el Departamento de Termodinámica de la Facultad de Físicas. 

Su tesis doctoral fue una de las primeras que se leyeron en España sobre los captadores solares para agua caliente sanitaria, concretamente fue la primera sobre superficies selectivas de captadores para agua caliente sanitaria en el año 1981.

En 1986 comenzó a trabajar como investigadora en el Ciemat, el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas, como jefe de sección de Arquitectura Bioclimática y Baja Temperatura en el grupo de Energías Renovables. En este centro ha desarrollado su carrera científica durante 36 años.

-Tendrá muchas anécdotas de todos estos años como científica e investigadora...

-Cuando empecé a trabajar como investigadora en el Ciemat en 1986, España había entrado en marzo en la Unión Europea y tuve que ir representando al país en los proyectos de investigación de la Dirección General Cinco de Investigación y Desarrollo. Éramos doce países y yo era la única mujer. Cuando llegué a la primera reunión, por primera vez iba un representante español y además era mujer. En esa Dirección Cinco de Investigación y Desarrollo había unos cuantos proyectos europeos con financiación. Nos reuníamos en cualquier país europeo cada quince días. Teníamos una especie de responsable en Bruselas, que era un señor mayor y era como si fuera mi padre porque yo era la única mujer. Mi obligación era ver lo que se hacía en Europa e intentar potenciar en España el tema de la energía solar en edificios.

-¿Cómo se aplicaba luego eso en España?

-Hacía reuniones cada año con los distintos grupos de investigación, universidades y gente que trabajaba en este tema de energía en los edificios. Siempre les decía en broma a mis compañeros europeos que ellos tenían un gobierno y unos ministerios, y yo tenía diecisiete comunidades autónomas más el Gobierno. Intenté hacer reuniones recorriendo los distintos grupos de investigación por toda Europa para intentar ver lo que se hacía allí y traerlo a España, y ver lo que se hacía en España y contarlo en Europa. Trabajábamos en ahorro de energía solar en edificios, lo que ahora se llama eficiencia energética de edificios. Había que contar las condiciones climáticas que tenemos en España, que no tienen nada que ver con las de Suecia o Inglaterra, por ejemplo. Tengo montones de anécdotas porque he viajado mucho. Como representante española me ha tocado moverme por toda España y Europa.

-A lo largo de su carrera ha recibido muchos reconocimientos, ¿cómo ha recibido el Premio eWoman?

-Me ha sorprendido porque no me lo esperaba. Que me hayan dado el premio eWoman es una satisfacción. Aparte de la sorpresa, es una gran satisfacción porque ahora mismo el tema de las mujeres es algo que hay que potenciar. He vivido reuniones donde era la única mujer. Como científica si me convence algo desde el punto de vista científico, doy mi consentimiento, pero si no me convence, digo que no y además intento decir las cosas a las clara y no tengo ningún inconveniente en hacerlo. Como mujer me ha costado muchas veces imponer mi opinión. Ahora mismo ya hay muchas más mujeres, pero todavía no hemos llegado al nivel. La Real Sociedad Española de Física existe desde el año 1903. Desde que acabé la carrera soy socia de esta sociedad y estuve en la junta directiva. En 2009 me nombraron presidenta de la Real Sociedad Española de Física y he sido la única mujer que ha ocupado este cargo. Las mujeres hemos sido pioneras en muchas cosas y ahora se empieza a reconocer. Otra cosa importante es que yo en mi vida no he renunciado, siempre he elegido y lo importante es elegir lo que creas que es lo mejor para ti.

-¿Cómo estamos en cuanto a eficiencia energética?

-Desde el año 86 que empecé, hemos progresado. Sí es cierto que ahora lo de eficiencia energética le suena mucho a la gente, pero todavía quedan muchas cosas por hacer. Lo importante, y lo estamos viendo ahora con la pandemia, son los datos y tener valores, por ejemplo, de cuánto gastas en tu casa y cuánto podrías ahorrar si los edificios estuvieran adaptados al tema climático. En edificios, en energía, en ahorro energético y en certificación energética de edificios todavía hay mucho que hacer y los ciudadanos tienen mucho que decir en el uso de nuestro edificio y el uso de la energía necesaria para estar bien en nuestras casas. Los valores de grados términos a los que deben estar los edificios son en invierno de 20 a 22 grados centígrados y en verano de 24 a 26. Todos los ciudadanos tenemos mucho que hacer en esto y es muy importante.