Algunos de los asistentes al concierto del sábado por la noche subrayaron que habían acudido a la edición número trece del Pórtico exclusivamente para escuchar al pianista español Javier Perianes, uno de los músicos de mayor proyección del país. Perianes no decepcionó con la interpretación de un programa centrado en el pensamiento místico de Santa Teresa de Jesús, a partir de la composición "Música callada" de Federico Mompou y algunas piezas de Claude Debussy.

"Es el culmen de la intimidad, la simbiosis perfecta entre el espacio, el tiempo y la música", calificó la organización esta actuación nocturna del sábado. En efecto, la música de Mompou basada en San Juan de la Cruz encontró en Perianes al aliado perfecto durante una sesión de una hora.

Perianes inició la actuación con el Primer Cuaderno de Mompou, un elogio a la intimidad y a la reflexión. El Cuarto Cuaderno del compositor puso punto y final a una actuación pensada en la reflexión interior de los espectadores, que aplaudieron la entrega de Perianes sobre el escenario de San Cipriano.