La víctima acudió al cuartel de la Policía Municipal, situado en la Plaza Mayor, hacia las 4.00 horas, acompañada por una amiga, donde efectuó un primer relato sucinto de la agresión sufrida, momento en el que los agentes pusieron en marcha el protocolo de agresión sexual, que incluye el traslado inmediato a un centro sanitario. Del mismo modo, se comunica a la Comisaría de la Policía Nacional el suceso para, competente en este tipo de delitos, para iniciar las pesquisas que lleven a resolver el delito.

El protocolo incluye medidas para no victimizar a las mujeres que denuncian agresiones sexuales, que incluye, por ejemplo, que la toma de declaración exhaustiva se llevará a cabo únicamente en la Comisaría de Zamora, por parte de la Policía Nacional, puesto que la agredida tendrá también que contar el episodio violento a médicos, forenses y juez cuando se le llame a declarar.

Siguiendo ese protocolo, la Policía Municipal acompañó al Hospital Virgen de la Concha a la joven que sufrió la violación la madrugada del día de San Pedro, con la que permanecieron hasta que se incorporó la Nacional, a los pocos minutos.