La soprano María Espada estrena el próximo viernes (22.00 horas) la cuarta edición del ciclo Domo Musical en la Catedral de Zamora. Acompañada del clavecinista Kennedy Moretti, Espada ofrecerá una muestra de la que, dicen, es una de las mejores voces femeninas actuales de la música barroca. El programa se titula "Fonti di pianto" y concentra un cúmulo de emociones narradas con partituras de Bach, Vivaldi y Haendel, el trío de ases de la música barroca.

-¿Cuándo nació su vocación por el canto?

-Fue en el colegio de mi ciudad natal, en Mérida. Surgió la idea de formar un coro de niños para hacer polifonía. Hice la prueba y fui admitida. Ese contacto directo con la música, especialmente la vocal, fue crucial en mi decisión de empezar a estudiar en el conservatorio.

-Habitualmente se dice que la música, en términos generales, conlleva un enorme sacrificio, ¿ha sido su caso?

-Para mí hubo algunos años duros, cuando compaginaba estudios en el instituto con los de piano, canto o armonía. Creo, en todo caso, que en todas las profesiones hay una dosis de sacrificio. No me parece que la música sea excepcionalmente sacrificada.

-¿Quién ha sido la figura que ha inspirado su carrera? ¿Aprendió a amar la música en el entorno familiar?

-Mis padres siempre han sido aficionados a la música. Y en mi casa teníamos un piano porque mi abuelo había estudiado la carrera aunque no se dedicó a ello. En cuanto a figuras del mundo de la música vocal, siempre fue para mí un modelo a seguir Anne Sofie von Otter.

-Ha estudiado canto con figuras de prestigio, como Alfredo Kraus, ¿cómo lo recuerda?

-De Alfredo Kraus siempre recuerdo su seriedad profesional y su claridad de ideas. Tenía muy claro lo que quería escuchar de sus alumnos, algo que no es poco.

-Ha trabajado con Jesús López Cobos, toresano ilustre que ha triunfado en la música clásica, ¿cómo ha sido la colaboración?

-Trabajé con López Cobos varias veces y siempre me pareció que un director excepcional, con un trato personal muy bueno, sencillo y amable.

-El título del programa que va a interpretar el próximo viernes es "Fonti di pianto", ¿podría explicarnos por qué?

-Es el nombre de la cantata de Vivaldi que haremos en el concierto. La palabra pianto (llanto) aparece en varias obras de las que vamos a interpretar, como expresión de estados de ánimo y sentimientos de diferente índole: pena, emoción, rabia, desesperación... Creímos que ese título encajaba bien al espíritu del programa.

-Su concierto engloba obras de Bach, Haendel y Vivaldi, el trío de ases de la música barroca. ¿Podría hablarnos de lo que cada uno de estos célebres compositores significan para usted?

-Son tres compositores maravillosos que cuanto más conozco más me gustan. Cada uno tiene su particularidad, pero todos son increíbles. Y aunque me encantan los tres, tengo que confesar una especial debilidad por Bach.

-Viene acompañada del clavecinista Kennedy Moretti. Háblenos de sus cualidades y de cómo es la relación en el escenario.

-Kennedy es un músico estupendo. Me da mucha tranquilidad y seguridad salir al escenario con él. Llevamos trabajando juntos casi veinte años, él sobre todo como pianista. Esto hace que nos conozcamos muy bien. Además tenemos visiones similares sobre la música y casi no hace falta hablar. Esto es algo muy valioso para mí.

-El proyecto Domo Musical nació para dar a conocer la historia de la Catedral, ¿le parece un buen instrumento de divulgación la propia música?

-Claro que sí. El ciclo Domo Musical una manera estupenda de acercar a la gente la historia de este edificio.

-¿Qué diferencia existe para usted entre interpretar un programa en un auditorio convencional y hacerlo en un templo que atesora casi mil años de historia?

-Un templo tiene siempre una magia especial. Desde luego es más inspirador a la hora de interpretar un lugar que te emocione por su belleza.

-El público de Zamora suele agotar las localidades en cada actuación, ¿le parece una buena noticia este interés actual por la llamada música antigua?

-Me alegra mucho saber que haya tanto interés por la música barroca. Es una época muy dulce la que está atravesando la música antigua.

-¿Cuál es el futuro de la música barroca? ¿Es aceptable la situación del mercado discográfico?

-Confío en un futuro prometedor. En el mercado discográfico creo que aún queda mucho por grabar. Pienso que actualmente tiene más sentido editar música barroca que música posterior, de la que ya se dispone de muchas versiones en el mercado.

-¿Cree que los festivales son la "salvación" para la música en todos sus géneros?

-Si no la salvación, al menos son de una gran ayuda.