El Construcciones Tevisa se reencontró el sábado con la victoria al imponerse en casa del BM Aranda Disaroil por un ajustado 28-29 en un partido en el que los zamoranos, una vez más, volvieron a mostrar su mejor y su peor cara.

Como venía ocurriendo en los últimos encuentros, el Construcciones Tevisa cuajó un mal arranque de partido. Las pérdidas de balón, casi una por minuto, ofrecían gran ventaja al "farolillo rojo" de la liga que no desaprovechaba ningún regalo para liderar con comodidad el tanteo.

El choque parecía condenado a perderse nuevamente cuando, en el minuto 15, el 11-6 campeaba en el marcador. Pero a partir de ahí los chicos de Borja Arnedillo despertaron.

Con un juego más dinámico y una actitud completamente diferente, el filial del Balonmano Zamora comenzó a funcionar sobre el 40x20 e inició una remontada que llegó a concretar tras el descanso. Así, en un segundo tiempo en el que mostró más intensidad defensiva y concentración a la hora de atacar, el Construcciones Tevisa encaró con un colchón de seis goles los últimos diez minutos de partido.

Un tramo final en el que los locales, que llegaron a creerse ganadores por un momento, perdieron los nervios y recrudecieron el juego.

El partido fue entonces una batalla llena de tensión y muchos nervios, cosa que afecto al Construcciones Tevisa que, en los últimos minutos, fue progresivamente perdiendo su renta aunque pudo salvar los dos puntos.