La clave de la remontada ha sido la capacidad de los populares de lograr el segundo escaño en circunscripciones en las que hace siete meses lo hizo Ciudadanos y sortear a la vez la subida de Vox. Así, los populares logran ese segundo diputado en Burgos, Palencia y Valladolid mientras que lo mantienen en Salamanca. En el resto de las provincias se quedan en uno. Los socialistas mantienen el mismo reparto que salió en las últimas elecciones generales: dos escaños en Burgos, León y Valladolid y uno en las demás provincias. El auge de Vox le permite obtener representación y trasladar los diputados que antes fueron de Ciudadanos a su filas en Ávila, León, Salamanca, Segovia, y Zamora, además de mantener el que tenía en Valladolid.

Los populares han ganado las elecciones en cinco provincias, Ávila, Salamanca, Segovia, Palencia y Zamora, dando la vuelta en estas dos últimas a los resultados de abril. Por el contrario, los socialistas se imponen en Burgos, León, Soria y Valladolid.

El mejor resultado del PP se produce en Salamanca, Palencia y Ávila, con el 35 por ciento de los votos, si bien en esta última provincia no es suficiente para ganar el segundo escaño. Por encima del 30 por ciento también se sitúan en Burgos, Segovia, Soria y Zamora y rozándolo en Valladolid . Es en León donde tradicionalmente tienen su peor resultado (28,4 por ciento). La formación de Pablo Casado crece en apoyos en toda la comunidad y especialmente en Salamanca, Segovia y Soria donde obtienen siete puntos más que en abril.

Los socialistas tienen sus mejores números desde hace tiempo en Soria, con casi un 35 por ciento de los votos y superan en 30 por ciento en Burgos, León, Palencia, Valladolid y Zamora, mientras que Salamanca y Segovia lo rozan. Ávila es la provincia que peor se les da y donde apenas llegan al 26 por ciento. La formación de Pedro Sánchez crece también en todas las provincias aunque lo hace de forma más moderada: tres puntos en Soria y Burgos, dos y medio en Valladolid y dos en Palencia, mientras que en el resto no llegan a ese dígito.

Vox logra sus mejores resultados en Ávila, Salamanca y Valladolid, donde sobrepasa el 18 por ciento y en Segovia y Zamora, se quedan en el 17. Soria es su peor plaza y donde apenas sobrepasan el 13 por ciento. Los de Santiago Abascal crecen en todas las provincias, pero en Salamanca y Zamora incrementan su apoyo en seis puntos, uno más que en Segovia y Valladolid.

Ciudadanos agudiza en Castilla y León la caída generalizada en el país (nueve puntos) y se deja 11,3 puntos de su electorado pasando del 18,8 por ciento al 7,5 por ciento, si bien su nivel de apoyo es ligeramente superior a la media nacional. El descenso es generalizado y más acusado en Ávila, Salamanca y Valladolid, donde se dejan doce puntos y en León y Segovia, once.

En Ávila, tradicional plaza segura para el PP, se le están atragantando los últimos comicios. Pese a que los populares suben casi tres puntos y medio y llegan al 34,8 por ciento, la pujanza de Vox en la provincia, que sube cuatro puntos y llega al 18,5 por ciento, el mejor resultado en la comunidad, le detraen el segundo escaño. En esta provincia los diputados se repartirán: uno para el PP, otro para el PSOE y el tercero para Vox. Ciudadanos sufre en esta circunscripción, una de las más potentes para sus intereses, una de sus mayores debacles y pasa del 18,7 por ciento al 6,4, doce puntos menos.

En Burgos, el bipartidismo sale claramente reforzado. El PSOE vuelve a ganar en la provincia del secretario general del PSOECyL, Luis Tudanca, y los cuatro escaños se reparten a partes iguales entre socialistas y populares, que además crecen en ambos casos en apoyo popular: el PSOE en tres puntos (llegan al 32,2 por ciento) y los populares en seis (llegan al 30,8).

León es uno de los feudos tradicionales del PSOE donde gobiernan ayuntamiento de la capital y diputación y mantienen su representación de dos escaños con el 33,5 por ciento de los votos. El PP aunque crece en casi cuatro puntos, con el 28,4 por ciento, no alcanza el apoyo suficiente para lograr el segundo escaño, que recae en Vox, con un 15 por ciento de los votos. El descalabro de Ciudadanos en la provincia llega a once puntos.

Los populares recuperan este 10-N la primacía en Palencia, donde en los anteriores comicios ganó el PSOE. En Salamanca, se produce el trueque del diputado de Ciudadanos, que se deja 12 puntos en la provincia, por el de Vox, que sube seis. El resto queda como estaba: el PP vuelve a ganar y obtiene uno de los mejores resultados en la comunidad (34,8 por ciento) y sentará dos diputados de la circunscripción en la carrera de San Jerónimo, mientras que el PSOE tendrá uno.

Segovia también cambia al representante de Ciudadanos por el de Vox y repartirá sus tres escaños entre PP, PSOE y Vox.

En Soria, es con Ceuta y Melilla el "mercado" electoral más estable de España. Tiene dos escaños que se reparten entre PSOE y PP. En Valladolid, los socialistas de Óscar Puente revalidan sus dos escaños, pero los populares estrechan la ventaja. Ciudadanos baja del 20 por ciento y Vox crece cinco puntos que le permite mantener su actual representante.

En Zamora se reproduce el reparto de sus tres escaños a tres formaciones: PP, PSOE y Vox.