-Definan a Podemos en relación al soberanismo en Cataluña

-(J. I.) Tan pronto acusan a Pablo de ser Lerroux y que va a captar allí el voto español como de lo contrario.

-(B. Ll.) Los nacionalistas nos tienen una fobia horrorosa porque piensan que les vamos a comer el terreno.

-(J. I.) Nosotros tenemos más simpatía con la gente del Proceso Constituyente, mucho más que con Esquerra y ya no digo nada de Convergencia. El besito del de la CUP con Mas ha sido definitivo.

-¿Ha acertado Podemos con lo de no concurrir con sus siglas a las municipales?

-(J. I. ) A mí me hubiera gustado que en Zamora se hubiera presentado con Izquierda Unida. Se lo ofrecimos públicamente. Pero al final parece que impera una cuestión más propia de celopatías.

-(B. Ll.) No quisieron renunciar a las siglas, no habría habido problema ni de candidatos ni de programas. Ir nosotros con nuestras siglas lo hubiera visto como un ejercicio de prepotencia, acabamos de llegar, no podíamos salir preparados. Si hay algo que me gusta de Podemos es la insistencia en la inteligencia colectiva. Se trabaja muy en serio, para que, entre todos, alumbremos ideas. Esa es una forma de combatir la mediocridad instalada.

-El voto de Podemos es voto urbano, universitario, de gente joven. ¿Llegan al mundo rural?

- (B. Ll.) Es mucho más difícil. La gente mayor es más reacia al cambio y es la población mayoritaria en los pueblos, donde, además, la única televisión que les llega es la televisión pública. Los cambios sociales empiezan siempre en las ciudades.

-Hagan sus apuestas para las generales.

-(J. I.) Si las generales fueran ahora sería enormemente optimista. La gente habla de fracaso en Andalucía, solo quince diputados. Pero hombre, si partíamos de cero y además era el sitio con peor puesto de salida para Podemos en España.

-(B. LL.)Yo para las generales tengo grandes perspectivas, aunque no subamos de la manera tan espectacular, pero no se hundirá como querrían todos aquellos que nos detestan. Yo creo que se asentará y volverá a remontar, en las generales Pablo Iglesias será el candidato y la gente le votará.

-(J. I.)Nunca pensé que llegaríamos a esto. Al principio lo tomé un poco como una locura. Pude ver a Pablo el 30 de enero en la manifestación gracias a que un compañero que me fue abriendo paso hasta él. No le veo desde entonces, aunque hablamos por teléfono.

-Hace un año le pregunté si, como padre, temía que Podemos acabara por devorar al Pablo que conoce...

-(J. I). No creo que ser recibido por jefes de Estado acabara por devorar al Pablo auténtico, al que le gusta tener los pies en la tierra. Ahora, claro, la sobreexposición es incómoda, sabe que no puede hablar con libertad, que va a ser juzgado por cada palabra, cada matiz?Es perfectamente consciente de ello. Me hace gracia por ejemplo cuando me dice: "¿Pero padre, sabes cuántas novias me han sacado ya?". Es gracioso, pero terrible.