El próximo 28 de abril se celebrarán las elecciones generales españolas. La campaña electoral se encuentra en su último estadio tras la emisión de los debates electorales de RTVE y Atresmedia los pasados 22 y 23 de abril, respectivamente, y en estos últimos días los posibles votantes han de sopesar a quién votarán o si, por el contrario, votarán en blanco u optarán por el voto nulo. ¿En qué consisten estas dos últimas opciones?Voto en blanco
El voto en blanco consiste en no meter ninguna papeleta en el sobre, en el caso del Congreso, y en no marcar ningún nombre en la papeleta, en el caso del Senado. Votar en blanco eleva el número de votos válidos computados, por lo que dificulta en cierta medida que los partidos minoritarios consigan escaños.
Voto nulo
El voto nulo es aquel que no es considerado válido por varias razones, como que la papeleta contenga mensajes, esté pintarrajeada o rota, o que en el sobre haya objetos ajenos a la votación. Que haya más de una papeleta en el sobre es también considerado voto nulo (aunque si son del mismo partido es válido).
Normalmente, el voto nulo es intencional, un modo de protesta, aunque en muchas otras el voto nulo tiene su origen en el descuido de votante. Marcar en la papeleta más de tres diputados en una circunscripción que pide que se escojan tres, por ejemplo, sería considerado voto nulo.
