Conoce al dedillo las necesidades de la provincia, pero también, por su cargo en la Comisión de Asuntos Iberoamericanos, la realidad de ese continente. El veterano político Dionisio García Carnero aspira a revalidar su puesto en el Senado, encabezando la lista del PP por la provincia.

-Soy un votante indeciso. ¿Qué argumento utiliza para convencerme?

-Votar a García Carnero no tiene ningún mérito especial, a quien hay que votar es al PP. Los votantes deben situarse en ver cómo estábamos hace cuatro años y cómo estamos hoy. ¿Usted quiere volver a las políticas que nos llevaron al precipicio en el que estábamos? ¿O quiere que el país siga por esta senda de recuperación que llevamos? Lo más duro ya está hecho y ahora estamos en el buen camino. Aunque todavía falta mucho por hacer. En los próximos cuatro años se pueden crear dos millones de empleos, sin necesidad de que se produzca ningún tipo de milagro, simplemente siguiendo por este camino. Y podremos llega a los 20 millones de empleos, que es lo que va a asegurar las pensiones y el estado del bienestar: sanidad, servicios sociales y dependencia.

-¿No se merecen un castigo en las urnas por los casos de corrupción?

-La corrupción es una miseria humana; hay corruptos como hay ladrones o asesinos. Lo importante es como se actúa contra ella: apartando al corrupto de la política y haciendo una serie de leyes que dificulte que alguien se corrompa. Y también haciendo que los corruptos, además de pagar las penas que les correspondan, devuelvan el dinero. En esta legislatura se han aprobado por el parlamento, por cierto con el voto en contra del Partido Socialista, una serie de leyes para dificultar que haya corruptos. Que haya corruptos entra dentro de las posibilidades, lo peligroso es la impunidad. Hay que poner en positivo que estando en el Gobierno el PP han actuado los jueces, la Policía, la Agencia Tributaria contra los corruptos, sean quienes sean, aunque sean personas relevantes dentro del Partido Popular. Lo que se demuestra es que aquí quien la hace la paga y que los poderes son independientes.

-Pueden sacar pecho con la autovía Zamora-Benavente o el AVE, pero estas grandes infraestructuras no acaban de desarrollar a la provincia.

-A pesar de las dificultades y los recortes se ha salido de esta situación pagando las pensiones, y tanto colegios como hospitales han seguido funcionando. Y en esa situación es para sentirse muy satisfechos de que la autovía Benavente Zamora se empezara, terminara y lleve unos meses funcionando y que llegue la alta velocidad, el AVE. Es mérito fundamentalmente de la ministra de Fomento, Ana Pastor, y su condición de zamorana. Pero el desarrollo y el empleo lo crean las empresas, la iniciativa privada. Lo que puede hacer la Administración son buenas infraestructuras, donde se ha avanzado mucho, aplicar una política tributaria favorecedora (hemos bajado impuestos en cuanto ha sido posible) y dar incentivos, como los que haremos para fomentar los contratos indefinidos.

-¿Pese a la irrupción de nuevas formaciones, el bipartidismo seguirá en Zamora?

-Ciudadanos y Podemos han nacido en Zamora como reflejo de lo ocurrido en el país, pero los candidatos, salvo alguno concreto, son personas desconocidas. Aquí los votantes no van a elegir a Albert Rivera, sino a un candidato desconocido. Son partidos del desencanto, del cabreo, que dicen a la gente lo que quiere oír., pero cuando se analizan las cosas el suflé se desinfla y se ve que son ocurrencias, como suprimir los ayuntamientos rurales. Y el PSOE está muy mal en la provincia. Con lo cual hay dos peleas: por ver quién es el segundo y quién es el cuarto.

-En la cena mitin de Benavente usted pide un esfuerzo a los alcaldes y les advierte que después analizarán los datos pueblo por pueblo a ver quién ha cumplido. Y que premiarán a los cumplidores a través de las instituciones. ¿No suena a caciquismo?

-Eso son frases fuera de contexto extraídas de un acto para concejales y militantes donde tratas de motivarles. Porque esos pequeños esfuerzos del militante suponen muchos votos.