-La reforma de la Constitucional es inevitable, Cataluña está ahí, ustedes abogan por reconocer singularidades, ¿no es más de lo mismo?

-No es sólo Cataluña. Necesitamos también un impulso para nuestras instituciones democráticas, con una reforma constitucional que blinde los derechos sociales, gravemente amenazados hoy por las políticas de la derecha. En España, además, debemos resolver también conflictos territoriales. Una reforma en clave federal es nuestra propuesta. La ruptura no es para nosotros la solución, por supuesto.

-Pero la tensión en Cataluña requiere una respuesta ya.

-No resolveremos nada si no abordamos los cambios que nuestra Constitución requiere 37 años después de su aprobación. La reforma de la Constitución exige un amplio grado de consenso que sólo los socialistas podemos lograr. Por eso, cuando gobernemos España, comenzar el diálogo constructivo para la reforma constitucional, será uno de nuestros primeros empeños.

-¿Es tan dramático que se convoque una consulta?

-Esa no es la cuestión, de hecho, se someterá a votación la reforma constitucional que lideraremos los socialistas. Lo que nadie puede es saltarse la ley. Eso es definitivo.

-El PP ha usado de nuevo la hucha de las pensiones para pagar la extra de Navidad. El sistema parece insostenible con un paro cada vez mayor y menos cotizantes.

-El sistema es perfectamente sostenible con medidas adecuadas para garantizarlo. Para el Partido Socialista, las pensiones son sinónimo de solidaridad y equidad, garantizan la dignidad y son un compromiso de calidad de vida. Rajoy las ha puesto en peligro, ha vaciado el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, que dejamos en su máximo histórico, con 70.000 millones de euros. Rajoy se ha gastado el futuro de las pensiones públicas, lo ha comprometido gravemente, porque quiere un futuro con pensiones privadas.

-¿Cómo las garantizarán ustedes si consiguen ponerse al frente del Gobierno?

-Los socialistas apostamos por un empleo digno y estable; por mejorar el sistema de financiación de las pensiones. También reforzaremos la cobertura a los desempleados con 52 años o más para asegurarles el acceso a una pensión digna y mejoraremos las prestaciones de maternidad para aumentar los periodos de interrupción laboral que se consideran cotizados.

-¿Qué puntos esenciales contemplará el nuevo Estatuto de los Trabajadores?

-Nuestro mercado laboral tiene problemas estructurales, agravados por las políticas del PP, su reforma laboral, que ha degradado la calidad del empleo, mientras que el poco que se crea es más precario, con menos derechos. El próximo Gobierno socialista derogará esa reforma laboral y aprobará un Estatuto de los Trabajadores que elimine la figura de los falsos autónomos y los falsos becarios, y que luche contra la precariedad.

-¿Cómo será posible terminar con esa precariedad encubierta que usted apunta?

-Para ello, habrá tres tipos de contratos: indefinido para la mayoría de los casos, temporal y de formación. El nuevo modelo laboral impulsado por el Gobierno del PSOE recuperará además el diálogo y la fortaleza de la negociación colectiva como instrumento de igualdad y de equilibrio de poder entre los trabajadores y el empresario.