La constitución de mesas en los centros y colegios electorales de la comarca de Sanabria y Carballeda se desarrollaba a primera hora de la mañana sin incidencias relevantes, como ratificaba la Junta Electoral de Zona poco después de abrirse la votación. La jornada se desarrolló sin incidentes reseñables y con menos nervios que en unas municipales y todo apuntaba a que con menos participación que en otras elecciones regionales.

Autocares con votantes de San Martín del Terroso A. S.

Puntuales llegaban los componentes de la mesa al CRA de Palacios de Sanabria, además de los suplentes y la representante de la Administración. La presidenta de mesa, una vecina de Otero de Sanabria, se mostraba algo nerviosa, no tanto por la jornada en sí sino por las circunstancias personales, acaba de enviudar y tiene a un familiar octogenario a su cargo y cuyo cuidado depende de ella.

Votación en Justel A. S.

La documentación que presentó para quedar excluida no se entregó dentro de plazo y por tanto no fue admitida y estaba obligada a presidir la mes, contando además tuvo que sustituir a la titular por enfermedad. La representante de la Administración explicó ampliamente el papeleo electoral y de manera exhaustiva las medidas anticovid. Estaba previsto además de mascarillas y gel un lote de guantes para hacer el recuento de votos manual. Todo listo para empezar la votación.

El voto por correo llega al colegio electoral de Puebla de Sanabria. A. S.

Alfonso Martín Santos era el más madrugador de los votantes sanabreses. A las nueve en punto, segundo arriba o segundo abajo, depositaba el primer sobre en la urna de la mesa B de Puebla de Sanabria. Hecha la faena “ahora a tomar café con churros”, sentenciaba el estrenado elector después de aguardar casi 45 minutos y ser testigo de los preparativos. Y el casi es porque antes de comenzar la votación la representante de Correos entregaba 27 votos “menos que en otras votaciones” como comentó uno de los miembros de mesa. Una de las dos mesas de Puebla donde la cortinilla de la cabina de votos del mismo modo que se puso –a instancias del representante de la Administración- se quitó porque “no había intimidad”.

Una persona espera en el exterior para poder votar en Puebla de Sanabria. Araceli Saavedra

Los votantes tenían que entrar de uno en uno a la mesa y el clima ayer en Sanabria era de órdago para estar a la intemperie. El termómetro marcaba -0.5 grados en la Plaza Mayor. A la hora en que se formaron las mesas la temperatura era de -2,5 grados, nublado con niebla y con la advertencia, que se cumplió, de agua a lo largo de la jornada.

Votaciones en Palacios de Sanabria. A. S.

"Vengo a votar porque durante mucho tiempo las mujeres lo tuvimos prohibido", dice una vecina de Sotillo

La mesa de Cobreros vivía la jornada con tranquilidad y se oía la frase más contundente del día. “Vengo a votar porque durante mucho tiempo a las mujeres se nos prohibió votar” decía una vecina de Sotillo, que no quiere que ponga su nombre. A las 16:15 de la tarde estaba prevista la ruta desde Sotillo “si no es por el autocar muchos mayores no pueden venir a votar”. En Cobreros donde hay 13 pueblos, estaban planificadas 12 rutas. Casi una decena de vecinos de San Martín de Terroso, incluido el chofer del autobús, hacían uso del transporte para acudir a la urna. “Ya voté” comentaba satisfecha una vecina. En la mesa tres vecinas veteranas ya en esta fiesta de la democracia.

En la mesa de El Puente, una de las tres del Ayuntamiento de Galende, los dos vocales eran los suplentes, al no comparecer los titulares aunque no tenían muy claro si era por incomparecencia o porque se admitió el recurso para no estar en la mesa, porque los dos tenían claro que habían sido convocados como suplentes. Como detalle significativo, el local electoral de El Puente no es otro que el consultorio médico.

GOTEO DE VOTOS

Entre las urnas más alejadas de la Junta Electoral de Zona señalar las de Muelas de los Caballeros y Justel.

Si en Ferreras de Arriba era una mesa formada por mujeres, en Muelas de los Caballeros el peso de la responsabilidad recayó en una terna masculina. El censo es de 173 votantes. A pocos minutos de las dos de la tarde ya han pasado por la urna 44 vecinos y los 9 votos por correo tendrán que esperar al cierre del colegio electoral para verificar e introducir los sobres con los votos emitidos anticipadamente. El ritmo es lento pero es el alcalde el que hace un cálculo tras el goteo de votantes de la mañana. “Habrá otro golpe de 3 a 5 de la tarde y otro de 7 a 8”.

Antes de las tres de la tarde, la urna de Justel contenía 21 votos sobre un censo de electores de 69 vecinos, eso representaba el 30 %, más los cuatro por correo. Tres pedanías se reparten unos 30 votantes en Justel, otros 30 en Villalverde y menos de una decena en Quintanilla. Precisamente el votante 21 era de Quintanilla. El presidente de mesa en Justel ha desempeñado este cargo en tres ocasiones y una más como vocal. La vocal, nacida en el pueblo pero residente primero en Bilbao y luego en Benavente, censada hace un año en Justel entraba a la mesa de votación. Comparaba en otra ocasión que le tocó estar en las urnas en Bilbao “nada que ver”.

El ritmo de electores es pausado y más a la hora de comer. Otro de los vocales se reintegra a la mesa y sale el presidente que comerá en el banco de la entrada al Ayuntamiento porque duda si puede ir a casa y porque el club gastronómico de Justel está cerrado “bueno y porque ya me han traído la comida”. Les llama la atención que en los pueblos de Galicia con censos tan pequeños en poco tiempo votan todos “¿será para la foto?”. Hay votantes que están ingresados en centros fuera del municipio y que evidentemente no vendrán a votar. Aun así, toca esperar.

En Otero de Bodas a las tres de la tarde la participación era media décima más del 50% del censo, contabilizando los 60 votos presenciales y los 15 por correo, sobre los 149 electores del censo de votantes. Para el más joven de los integrantes de la mesa era su primera convocatoria mientras que para otra de las jóvenes “ya me tocó en las anteriores”, las municipales, europeas y regionales. Un detalle visual era la manta y los dos calefactores en el local vecinal que es sede electoral local.