Ana Sánchez (Zamora, 1977) lidera nuevamente la lista del PSOE de cara a las elecciones en Castilla y León. La candidata se expresa con contundencia, y critica con dureza la gestión del Partido Popular. El objetivo de la socialista, como el de todos sus compañeros en Castilla y León, es que la cuenta de los gobiernos de la derecha en la comunidad se detenga en 35 años para dar paso a la alternativa de Luis Tudanca. Así lo explica en esta entrevista que tuvo lugar unas horas antes del positivo por COVID que ahora la mantiene confinada.

–A la vista de las encuestas, ¿cree que habrá una mayoría suficiente para el cambio?

–Estoy completamente convencida, pero estaba completamente convencida antes de que las encuestas fueran marcando una tendencia ascendente y constante a favor de la ola de cambio que solo representa Luis Tudanca en Castilla y León. Nosotros somos unos convencidos de que la mejor encuesta es la pulsión diaria, y no hemos sentido en ningún momento, durante estos dos años, que eso haya mermado. Mañueco ha demostrado que es la cara más decadente de los 35 años del PP en Castilla y León y que todo es susceptible de empeorar. Hemos llegado a este punto en el que hay que elegir un Gobierno del PP y Vox o un Gobierno del PSOE, pero creo que la ola del cambio, con los aires que llegan de Portugal, es imparable.

–¿Opina que, paradójicamente, los augurios sobre un ascenso de Vox les pueden ir bien para movilizar a su electorado?

–Yo creo que el ascenso de Vox nunca es bueno para nadie. Retroceder en derechos y en libertades es una pésima noticia. Pero Alfonso Fernández Mañueco, que con tal de gobernar es capaz de todo, lo está fiando esta vez a un pacto con Vox. Es infame y perjudicial para nuestra tierra. Yo pido que, una vez se ha demostrado que el cambio lo representa solo Luis Tudanca, los ciudadanos depositen muy mayoritariamente su confianza en él.

–El PP apunta al riesgo del “Gobierno Frankenstein”, la expresión que utiliza para hablar de la necesidad de la unión de muchos partidos para lograr una mayoría alternativa. ¿El PSOE estaría dispuesto a pactar con cualquiera que no fuera PP y Vox, incluso con Ciudadanos?

–El PSOE en España y en Castilla y León representa la estabilidad, porque creemos en la búsqueda de consenso, en el diálogo con el diferente. Es necesario que se vuelva a esa política de mesura, de sentarse a hablar con el distinto. El PP de Castilla y León se ha mostrado incapaz de hablar con su propio socio de Gobierno, y que aluda ahora a los acuerdos entre diferentes como “Frankenstein” es una falta de respeto a los ciudadanos que depositan su confianza en Por Ávila, en UPL, en la España Vaciada... Nosotros nos entenderemos con todos aquellos que quieran mejorar la vida de los castellanos y los leoneses. Al otro lado está la decadencia, la corrupción y las eternas promesas incumplidas.

¿Dónde están las cúpulas del Duero, el palacio de congresos o el funicular de Sanabria?

–¿Francisco Igea está entre esas personas que quieren mejorar la vida de la gente?

–Vamos a ver si Igea obtiene representación. Él prometió cambio y regeneración, pero perpetuó la corrupción en el poder del PP.

–La campaña está suponiendo la llegada a Castilla y León de los principales líderes de los partidos. Mañueco está cargando con dureza contra el “sanchismo”. ¿Cree que están justificados esos ataques?

–Son una muestra de su manifiesta ineficacia. Él carece absolutamente de una gestión que pueda defender, se avergüenza. Miren, somos zamoranos. Yo le oía el pasado fin de semana prometer un plan para Aliste y me parecía ciertamente ofensivo, una auténtica falta de respeto. Lo único que ha hecho con La Raya ha sido presentar el plan sanitario que cercenaba los derechos de los zamoranos, que cerraba consultorios, que llevaba a cerrar nuestros pueblos. Y ahora aparece como el presentador del euromillón, comprometiendo dinero. Creo que es importante que contrapongamos los dos modelos. ¿Qué es lo que le resulta ofensivo del Gobierno de España? ¿Que más de 48.000 pensionistas de Zamora vayan a ver incrementado su poder adquisitivo? ¿Que más de 9.000 autónomos hayan cobrado por primera vez una ayuda? ¿En contra de qué está Mañueco? ¿En contra de Monte la Reina? Ya está bien de boicotear a Zamora.

–Usted repite mucho la frase “no somos iguales, ni medio parecidos” para marcar distancia con el PP. ¿Percibe que hay una parte del electorado que identifica como un todo al bipartidismo y va a ir hacia otras opciones?

–No somos iguales al PP de Zamora. Le pongo ejemplos muy gráficos: comprometieron en 2009 la biorrefinería de Barcial del Barco y vinieron a poner la primera piedra. Trece años después, la biorrefinería no está en marcha pero, por supuesto, no han renunciado a las mordidas, al sabotaje y a la corrupción que denuncian los promotores. Ese mismo año también comprometieron la Braganza – Puebla. En el presupuesto para 2022 destinaban 10.000 euros y no se les cae la cara de vergüenza. ¿Dónde están las cúpulas del Duero, el palacio de congresos, el centro de salud de Villalpando o el funicular de Sanabria? Les entró una fiebre horrorosa porque cumpliéramos con Monte la Reina en dos años, y cumplimos. Es decir, no somos iguales. El PP de Zamora no tiene palabra, pero los socialistas sí vamos a cumplir. Pondremos en marcha el Plan Zamora y creemos que se puede revertir la tendencia. Castilla y León tiene preasignados más de 1.600 millones de euros de los fondos de recuperación. Probablemente, esta sea una de nuestras últimas oportunidades. El Plan Zamora puede obtener financiación en ese marco, pero para eso hay que tener voluntad política, y capacidad de trabajo.

El Partido Popular ha perdido el oremus y nos ha tomado a los zamoranos como menores de edad

–En Sanidad, usted critica el plan Aliste. ¿Cuál es el modelo que plantea el PSOE?

–El PP ha hecho un ejercicio sin límites de cinismo con la Sanidad. Mañueco tiene la osadía de decir que ahora va a hacer una ley para prohibirse a sí mismo volver a cerrar los consultorios. Es de aurora boreal. Yo creo que el PP ha perdido el oremus y que nos ha tomado por menores de edad. La situación de la Sanidad en Zamora y en Castilla y León no es de ahora. La manifestación que aunó a 50.000 personas en Valladolid es de 2015; los recortes son del PP en las últimas décadas. Lo primero que hizo el consejero, nada más llegar al puesto después de que echarán de mala manera a su predecesora en plena sexta ola fue privatizar los test de antígenos para dárselos a empresas de amiguetes. ¿Cuál es el modelo del PSOE? La defensa de una Sanidad pública para todos y dotada de financiación. Sin eso no podemos hacer nada. El Gobierno de España ha enviado 1.600 millones para la garantía de la prestación de servicios y hay que ofrecer incentivos a los profesionales; hay que hacer discriminación positiva con los sanitarios que tienen que poder quedarse en el medio rural.

–¿También hace falta exigir que el Gobierno haga un esfuerzo por esta comunidad en la financiación autonómica?

–No soy yo sospechosa de no levantar la voz cuando no estoy de acuerdo con el Gobierno de España. Le aseguro que esta que le habla y todos los integrantes socialistas del Parlamento autonómico anteponemos siempre los intereses de nuestra tierra a los de los colores políticos. Entre otras cosas porque nuestra situación es tan alarmante que no hay otra opción. Hay que exigirle al Gobierno de España, que se está implicando, mayor implicación aún, pero quien tiene las competencias es la Junta. Por tanto, la primera en exigirle a Tudanca que tiene que corregir estos desequilibrios territoriales seré yo.

–Para terminar, le quiero preguntar por el asunto que marcó parte del inicio de la campaña: las macrogranjas. ¿Ustedes creen que hay que reducir el número de licencias que se otorgan para este tipo de industrias?

–Nosotros siempre hemos defendido el modelo social agrario, el que apuesta por pequeñas y medianas explotaciones. Con respecto a la ubicación de macrogranjas, los responsables son los dirigentes de la Junta, porque no han elaborado un marco legal, y le aseguro que lo que haremos los socialistas será regular esta situación.