Unidas Podemos inició la campaña con la intención de posicionarse como “la voz de los sectores más desprotegidos”. Los miembros de la coalición entienden que se enfrentan a “un momento de lucha”, en el que se torna más necesario el avance social, por lo que confían en lograr un buen resultado el 13 de febrero para caminar por esa vía.

Al menos, así lo expresó la cabeza de lista de la candidatura morada por la provincia, Isabel Reguilón, que advirtió de que “nada está decidido” antes del paso por las urnas, a pesar de que las encuestas dejan a Unidas Podemos lejos de la posibilidad de recuperar el procurador que logró por la circunscripción para la legislatura autonómica 2015-2019.

En cuanto a las claves de la campaña, el partido marcará su posición sobre el terreno para cargar contra las macrogranjas o defender la sanidad pública.