Las elecciones municipales de ayer dieron como resultado un vuelco en el poder municipal en las principales ciudades de la comunidad inédito en la historia democrática y, aunque es la fuerza más votada en siete de las nueve capitales de provincia -en todas menos en Soria y Segovia, donde gobierna actualmente el PSOE- ha perdido todas las mayorías absolutas cosechadas hace cuatro años y la política de pactos deberá imponerse para gobernar. Los socialistas mantienen la mayoría absoluta en el consistorio de Soria y se quedan a las puertas en Segovia, donde podrán gobernar con IU. Ciudadanos y las candidaturas apoyadas por Podemos serán cruciales para otorgar las mayorías necesarias para gobernar, mientras que IU logra representación en un gran número de capitales y UPyD, en Ávila y Segovia.

Los populares necesitarán de apoyos para alcanzar las Alcaldías en Ávila, Burgos, León, Palencia y Salamanca, mientras que teóricamente las urnas han arrojado mayorías de izquierda en Valladolid y Zamora. En Soria, Carlos Martínez podrá seguir otros cuatro años en la Alcaldía sin problemas al revalidar su mayoría absoluta, en tanto que Segovia, Clara Luquero podrá reeditar su pacto con IU.

Los populares, que hace cuatro años superaron el 50 por ciento de los votos en todas las grandes ciudades a excepción de León, en estos comicios no han llegado al 40 por ciento en ninguna de ellas y han obtenido su mejor resultado en Salamanca y Palencia, con el 39,35 y el 37,52 por ciento de los sufragios. Destaca, asimismo, el desplome en Ávila, donde el PP pierde 18 puntos respecto a hace cuatro años para quedarse en el 33 por ciento de los apoyos.

En el resto de las capitales la pérdida está en torno a los 15 en Burgos, Valladolid y Ponferrada, donde han pagado la posición del Gobierno central respecto al carbón; 14, en Salamanca y Zamora; 13, en Segovia y León y 12, en Palencia, donde mejor aguanta el retroceso municipal. Pese a la pérdida de la mayoría absoluta, Valladolid es la tercera ciudad de la comunidad con un mayor apoyo hacia el PP, con el 35 por ciento de los votos, mientras que en Zamora, el respaldo llega al 32,5 por ciento. En Burgos y León supera el 31 por ciento y en Segovia y Soria, se queda en el 29 por ciento. Los socialistas logran su mejor resultado en Soria y Segovia, con el 47 y el 40 por ciento, respectivamente, dos provincias en las que apenas han sufrido desgaste (apenas dos puntos en la capital segoviana).

El PSOE sufre su principal retroceso en Aranda de Duero donde se deja diez puntos hasta el 20 por ciento; en Zamora, donde paga la crisis interna, con más de seis y en León y Palencia, donde pierde seis y siete puntos, respectivamente. En Salamanca, retrocede cinco puntos; en Valladolid, cuatro y en Ávila, apenas dos.

IU logra ser la segunda fuerza política en Zamora, con el 29 por ciento de los votos y la coalición en la que participa también se queda cerca en Burgos, con el 20,7 por ciento. En Valladolid será decisivo con el 13,3 por ciento de los votos y en Ávila y Salamanca (enmarcada en la candidatura de Ganemos) supera el diez por ciento.

Los mejores resultados de Ciudadanos los logra en Ávila, donde se convierte en la segunda fuerza política, con el 18 por ciento de los sufragios. La formación de Albert Rivera supera el diez por ciento en Burgos (14 por ciento), León y Salamanca, con más del 13 por ciento y Palencia, el diez por ciento.

En términos generales, el PP ha ganado en porcentaje de votos y en número de concejales las elecciones municipales, con el 38,4 por ciento de los sufragios y 7.236 concejales, seguido del PSOE, con el 28,6 por ciento de los apoyos y 3.695 ediles. La tercera fuerza política municipal en la comunidad ha sido Ciudadanos, con el 7,7 por ciento de los representantes locales y 474 concejales, mientras que IU alcanza el 3,3 por ciento de los votos y 163 ediles.