La pandemia ha acelerado la digitalización de todos los sectores y obligó a muchas empresas a prepararse de forma rápida a la situación e implantar distintas soluciones que permitiesen el teletrabajo entre sus empleados. Este fue un proceso complicado para las grandes compañías pero sobre todo para las pequeñas y medianas empresas que seguían y siguen a la cola de la digitalización. 

“La única manera para conseguir subir a la nube y digitalizar la micro y pequeña empresa, es haciéndolo a través de las empresas de informática de toda la vida. Al fin y al cabo, son estas empresas de informática las que siempre han estado ahí (capilaridad) y las que son valoradas como el referente tecnológico (confianza y cercanía)”.

Así lo explica David Amorín, cofundador y consejero delegado de Jotelulu, la plataforma de servicios en la nube que ayuda a transformar pequeñas compañías de informática en proveedores de cloud.

Esta startup nació a finales de 2019 con el objetivo de ayudar a estos pequeños negocios a ofrecer múltiples servicios a sus clientes con su propia marca y precios.

“Como empresa de informática vimos que al trabajar con los grandes proveedores de cloud como Amazon, Microsoft o Google nos encontrábamos con muchos problemas como plataformas complejas de gestionar técnicamente, poco margen de beneficio o un nivel de soporte que no era el que deseábamos”, asegura Amorín. 

Desde soluciones para escritorios en remoto, pasando por servidores, hasta centralitas virtuales; esta plataforma es para el fundador de Jotelulu como “un supermercado” de todos los servicios basados en la nube que puedan necesitar los clientes de estas empresas IT, a través de la cual también pueden realizar la configuración y la puesta en marcha de los mismos. 

Además del aprovisionamiento, desde la plataforma estas pequeñas empresas de informática también pueden gestionar todo el ciclo de vida del cliente, es decir, centraliza todos los procesos de venta, técnico, administrativo y legal para la comercialización de servicios en la nube. “Toda la elaboración del presupuesto, marca blanca, calculo de márgenes, generación de los contratos , es decir, todo lo que implica la generación de una oferta comercial”, señala. Una vez que el cliente final lo acepta desde la misma plataforma las empresas pueden dar de alta al cliente y pueden desplegar el servicio que necesiten.

Jotelulu trabaja desde su creación bajo la sencillez, debido a su facilidad de uso; la marca blanca, ya que todos los servicios e incluso la plataforma son marca blanca; el apoyo y la cercanía con sus clientes; y precios especiales debido a que todas sus infraestructuras son propias. 

Respecto a este último factor, Amorín asegura que los márgenes de beneficio están siendo el doble de la media que hay en el mercado, “si con otros proveedores conocidos están ganando un 15% con nosotros están ganando entre un 35% y un 40% de beneficio ya que al ser los propietarios de los centros de datos nuestros precios son muy competitivos”. 

La pandemia ha beneficiado a la compañía, obteniendo un crecimiento mensual sostenido de casi un 25% en el último año y para este 2021 esperan crecer más de 120% respecto al año anterior.

Ahora mismo la startup está preparando su primera ronda de financiación con el objetivo de lanzar nuevos servicios y desplegar centros de datos en otros mercados de Europa y LATAM