Sector financiero español

Oliu, presidente del Sabadell: "Es imposible que la situación del Silicon Valley Bank ocurra en Europa"

El banquero asegura que la solvencia y la liquidez del sector financiero español "están fuera de toda duda" y mantiene que la entidad está en una condición "parecida o mejor" que sus competidores

El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, entre miércoles en Alicante.

El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, entre miércoles en Alicante. / Información

El Sabadell no está dispuesto a que los mercados lo señalen como el eslabón más débil del sector ante una posible crisis financiera y por eso sus responsables se han esforzado hoy en acotar lo ocurrido con el Silicon Valley Bank (SVB) y Credit Suissey dejar claro que se trata de situaciones particulares, que nada tienen que ver con la realidad del sistema financiero en la eurozona o con la de la propia entidad.

"Es imposible que ocurra en Europa", ha asegurado rotundo el presidente del banco con sede en Alicante, Josep Oliu, en referencia a la quiebra de la entidad norteamericana, que ha atribuido a la mala gestión y a la "ausencia de una supervisión adecuada" a las entidades de este tamaño al otro lado del Atlántico. Por eso, durante el tradicional encuentro que mantiene con la prensa en la jornada previa a la junta general de accionistas, y en el que también han participado el CEO de la entidad, César González Bueno, y el resto de miembros del consejo de dirección, Oliu ha descartado que las turbulencias provocadas por el SVB y Credit Suisse acaben teniendo mayores repercusiones para la banca en España y en Europa. "No hay ninguna razón para que esto nos afecte", ha insistido el banquero.

Así, Oliu ha recordado que la quiebra del SVB se debe a que la entidad había invertido el equivalente al 70% de los depósitos de sus clientes en deuda pública a largo plazo y que, además, el 95% de los fondos de estos clientes no estaban cubiertos por el Fondo de Garantía. Una situación que dista mucho de la que presenta el Sabadell, según se ha encargado de recalcar, donde la cartera de deuda pública apenas pesa un 11% en su balance –además, con bonos a corto plazo- y más del 60% de los depósitos están cubiertos por el mecanismo de garantía, lo que reduce el riesgo de fugas.

La sede del Banco Sabadell en la ciudad de Alicante.

La sede del Banco Sabadell en la ciudad de Alicante. / EFE

En la misma línea, César González-Bueno ha destacado que actualmente el Sabadell es el segundo de los grandes bancos europeos con mayor disposición de liquidez a corto plazo –a un mes vista- y el noveno a un año, de acuerdo con los parámetros que se utilizan en el sector. En este sentido, el ejecutivo ha atribuido el castigo que ha sufrido el Sabadell en los mercados a que también era uno de los valores que más se habían revalorizado en los últimos años, por lo que muchos inversores optaron por materializar las ganancias ante la incertidumbre que se generó.

En concreto, ha recordado que el Sabadell es el banco que más se ha revalorizado en toda Europa desde 2021 y que, a pesar de la bajada provocada por la quiebra del SVB, solo desde principios de año acumula un alza de alrededor del 20%.

"La solvencia y la liquidez de la banca española están fuera de toda duda", ha insistido Josep Oliu, que también ha calificado de "reconfortante" la actuación del BCE. En especial, por haber dejado claro que mantendrá la actual prelación en la absorción de pérdidas frente a la decisión de las autoridades suizas de favorecer a los accionistas por delante de los tenedores de Coco's –bonos convertibles-, lo que había provocado el desplome de estos títulos en el mercado.

Igualmente y después de que en 2020 los mercados castigaran a la entidad y estuvieran a punto de forzar su fusión con BBVA tras la crisis provocada por el covid, Oliu ha defendido que actualmente la situación del Sabadell es "parecida o algo mejor" que la del resto de bancos españoles.

Tanto es así, que el consejero delegado del Sabadell ha señalado que no piensan modificar sus previsiones tras las turbulencias provocadas por la quiebra del SVB y Credit Suisse y que el banco mantiene su hoja de ruta, que se centra en mejorar la rentabilidad de la entidad.

Oliu atiende a los medios, este miércoles, en Alicante.

Oliu atiende a los medios, este miércoles, en Alicante. / Información

Reeleción

Por otro lado, preguntado por los motivos que le han llevado a renovar su mandato durante otros cuatro años más –una decisión que debe aprobar la junta este jueves-, Oliu ha asegurado que no lo hace por sentir que tenga nada "pendiente", sino por el "compromiso" que tiene con la entidad. "Tengo ilusión en lo que el banco está haciendo y con el equipo que César González-Bueno está liderando. Mi posición en el banco va a ser apoyar este equipo y colaborar con mi experiencia", ha apuntado.

Por otro lado, ha justificado la decisión del banco de recurrir en los tribunales el nuevo impuesto temporal a la banca aprobado por el Gobierno por la "obligación de defender los intereses de los accionistas". Además, aunque no ha querido cargar las tintas en exceso, ha señalado que "todo lo que vaya en detrimento de la posibilidad de generación de solvencia de los bancos en un marco estable no es bueno".

Sin motivos para cambiar la sede

El presidente del Sabadell, Josep Oliu, ha vuelto a dejar claro que la entidad no ve motivos para un nuevo cambio de sede, tras la decisión de fijarla en Alicante en 2017, ante el riesgo que suponía el desafío independentista en Cataluña. "No está encima de la mesa. No es algo que se esté planteando y, si mi pregunta qué condiciones deberían darse para que se planteara, no lo sé pero todavía no se han dado", ha respondido ante la pregunta de un medio catalán, que ha planteado si era uno de los asuntos pendientes por los que Oliu quiere renovar en la presidencia del banco otros cuatro años.