SECTOR FINANCIERO

La Fundación Unicaja activa el proceso de relevo de sus consejeros en el banco

El patronato ha aprobado este jueves iniciar los pasos para sustituir a sus cuatro representantes dominicales en el consejo de administración de Unicaja Banco

La sede de la Fundación Unicaja en Málaga.

La sede de la Fundación Unicaja en Málaga. / A. C.

José Vicente Rodríguez

El patronato de la Fundación Unicaja, principal accionista del banco con el 30,2% de los títulos, ha decidido este jueves iniciar el proceso de sustitución de sus cuatro consejeros dominicales presentes en el consejo de administración de la entidad financiera, según han confirmado a este periódico fuentes cercanas a la institución. Estos cuatro representantes (Juan Fraile, Petra Mateos-Aparicio, Teresa Sáez y Manuel Muela) vienen siendo objeto de controversia desde la fusión de Unicaja con Liberbank, materializada el pasado año, ya que se les ha reprochado que en diversas ocasiones hayan alineado su voto en el consejo a favor del denominado bloque asturiano, liderado por el consejero delegado, Manuel Menéndez, y en detrimento de las tesis del presidente, el malagueño Manuel Azuaga.

Los cuatro consejeros a los que ahora se quiere cambiar fueron propuestos por el anterior presidente de la Fundación Unicaja, Braulio Medel, y reelegidos en su cargo en la junta de accionistas que el banco celebró el pasado mes de marzo. Sin embargo, tras la dimisión de Medel como presidente de la Fundación y la llegada de José Manuel Domínguez al cargo en junio, su situación quedó en entredicho. De hecho, Domínguez ya advirtió en su primera rueda de prensa como presidente que se iba a evaluar de forma interna si los consejeros dominicales designados para el banco se habían ajustado a la defensa de los intereses de la Fundación y al protocolo de la fusión de Unicaja y Liberbank (donde el peso de la entidad malagueña fue del 60% y la del antiguo banco asturiano del 40%).

Esta evaluación realizada por la Fundación, aunque no ha sido hecha pública, sí le ha llevado, como conclusión, a reconocer una "pérdida de confianza" hacia estos consejeros, según han venido comentando en las últimas semanas fuentes conocedoras de la situación. Los intentos de comunicación con los consejeros tampoco han sido productivos, con excepción de Juan Fraile, con el que el contacto siempre ha sido fluido y que, además, ha sido el único que ha puesto su cargo a disposición de la Fundación. 

El patronato de este jueves ha decidido, de esta forma, activar el inicio de este proceso de sustitución para designar a nuevos representantes en el consejo de Unicaja Banco y afrontar así con mayores garantías un 2023 donde la entidad financiera acometerá un decisivo cambio de gobernanza con el 31 de julio como fecha tope (para entonces, por un lado, el presidente, Manuel Azuaga, debe ceder sus funciones ejecutivas y, por otro, el cargo de consejero delegado que ocupa Menéndez tendrá que ser revaluado por el consejo). 

La idea es que la Fundación vaya recabando en los próximos días perfiles de posibles sustitutos, para decidir un relevo que debería ser efectivo antes de finales de año. Según ha informado Efe, la Fundación ha acordado la creación de una comisión de nombramientos que evaluará la idoneidad de sus posibles sustitutos. Esta comisión de nombramientos está formada Emilio Alba, Ángela Callejón, Pedro Fernández, Antonio Pascual y Ana María Salinas, quienes serán los encargados de seleccionar a los nuevos representantes de la Fundación en Unicaja Banco. 

Opciones para propiciar el cambio

Según explicaron hace unos días a este periódico fuentes del sector, las opciones para el cambio de consejeros pasaban por tres vías: la primera, que los actuales cuatro representantes dominicales aceptaran presentar su renuncia (y, de momento, sólo Fraile ha puesto su cargo a disposición) y dejaran así vía libre para incorporar a los sustitutos. De no ser así, la segunda alternativa es que la Fundación, una vez designe a los sustitutos, inste en un momento dado al banco a que celebre una junta extraordinaria de accionistas para que se produzca el relevo, cesando en ese momento los actuales consejeros; y la tercera, que se espere a la junta ordinaria de accionistas de 2023 (que tendrá lugar en primavera, antes de que acabe abril) para plantear la cuestión. De cualquier forma, los nuevos consejeros propuestos tendrían que recibir antes el visto bueno del Banco Central Europeo, que siempre realiza un proceso de supervisión cuando se producen incorporaciones a los consejos de las entidades financieras.