Y de nuevo ganó el nerviosismo y los temores a una recesión en la vigilia de una reunión de la Reserva Federal de EEUU en la que se podría aprobar un aumento de hasta 0,75 puntos. La inflación e impone las tesis de los más 'halcones' en los bancos centrales. La tasa anual del IPC en mayo en Alemania, el 7,9% es la más elevada desde 1973. En este contexto, el Ibex 35 ha bajado un 1,43% hasta los 8.066,40 puntos, y se ha desplomado un 9% en las últimas cuatro sesiones, con el riego de perder la cota de los 8.000 puntos si la tendencia se acentúa en las próximas sesiones.

A la vez que caen los mercados de renta variable escalan las rentabilidades de la deuda pública ante los temores a un endurecimiento de la política monetaria mucho mayor del que preveía esperar. La rentabilidad del bono estadounidense a 10 años repunta hasta el 3,41% y el rendimiento del bono español escala al 3,07%, máximos desde 2014. No solo el mercado español ha cedido, también el resto de plazas europeas, que han intentado rebotar tras el desplome de más del 3% del lunes.

En Wall Street, que este martes cotiza con signo mixto y gran volatilidad con otra vez el predominio de las pérdidas, los descensos fueron especialmente acusados el lunes -el S&P 500 entró en mercado bajista y marcó mínimos anuales-, mientras que en Asia han continuado las ventas por el efecto contagio.

Dentro del Ibex, destacan las subidas en Repsol y los bancos tras los últimos retrocesos (aunque se moderan considerablemente) y las caídas en PharmaMar, Redeia (antigua Red Eléctrica) y Solaria. En cuanto al aspecto técnico del Ibex, atentos a un cierre por debajo del soporte de los 8.134 puntos, que abriría la puerta a un nuevo tramo bajista.

La reunión de la Reserva Federal, que ha empezado este martes y que concluirá el miércoles, puede ser decisiva para los inversores. No solo por la decisión que pueda tomar sobre el precio del dinero, con una subida de 0,75 puntos en vez de los 0,50 previstos, sino por los planes que pueda revelar el presidente de la institución, Jerome Powell.

Y todo ello en un en torno en el que las criptomonedas, que se habían vendido como un activo refugio, evidencia que no lo son tanto. El bitcoin ha llegado a caer por debajo de 21.000 dólares este martes mientras que ayer se desplomaba por debajo de los 24.000. La criptomoneda por excelencia se ha derrumbado cerca de un 14% en las últimas 24 horas, mientras que el ethereum se ha desplomado más de un 12% en el mismo periodo, según datos de Coinbase