Seat mejoró su rendimiento económico el año pasado, aunque la crisis de los microchips lastró sus ventas y se mantuvo en números rojos. Sin haber sido desvelado el resultado neto, la compañía formada por Seat y Cupra ha presentado pérdidas operativas por valor de 233 millones de euros, lo que supone una subida del 31,2% respecto a 2020.

Según los datos presentados por el Grupo Volkswagen, las dos firmas contabilizaron 471.000 entregas, un 10,3% más, que sirvieron para generar 9.614 millones de euros en ingresos, un 4,5% más. El consorcio alemán celebra la recuperación de las ventas y el importante crecimiento de Cupra, pero considera que la mejora fue “una recuperación incompleta”, citando el encarecimiento de las materias primas y la crisis de abastecimiento de componentes como los lastres para las enseñas españolas. Así, el margen operativo de Seat y Cupra fue negativo, del -2,4%, mejorando desde el -3,7% de 2020.

El Grupo Volkswagen ha presentado las cifras relativas al rendimiento económico de sus marcas para el año 2021 tras anunciar la semana pasada un beneficio conjunto de 15.428 millones de euros, un 74,8% más respecto a 2020. El grupo alemán vendió 8,88 millones de unidades el año pasado, un 4,5% menos, pero la reducción de costes y el incremento en las ventas de vehículos más caros, que permiten una mayor rentabilidad, permitieron una subida de los ingresos del 12,3% hasta los 250.200 millones de euros, dejando un beneficio operativo de 19.275 millones de euros, un 99,2% más y un margen operativo del 8%, casi doblando el 4,8% de 2020.

Resultados por marcas

Además de Seat y Cupra, el Grupo Volkswagen lo integran marcas como Volkswagen, Audi, Skoda, Porsche, Bentley o Volkswagen Vehículos Comerciales. La primera vio como sus ingresos caían un 7,1% hasta los 76.100 millones de euros y el margen por unidad vendida se situaba en el 3,3% mejorando desde el 0,6% de 2020. Así, Volkswagen cerró 2021 con un beneficio operativo de 2.503 millones de euros, una importante subida en comparación de los 454 millones de 2020.

Skoda también vio como sus ventas caían, en su caso un 12,6%, aunque su facturación creció un 3,9% hasta los 17.743 millones de euros. El resultado operativo fue de 1.083 millones de euros, un 43,2% más, mientras que el margen por unidad subió hasta el 6,1% desde el 4,4% de 2020. Volkswagen Vehículos Comerciales, en la misma línea, vendió menos, un 3,2%, pero facturó un 5,9% más hasta los 9.909 millones de euros. Su beneficio operativo alcanzó los 73 millones de euros en comparación con las pérdidas por valor de 454 millones de euros el año anterior.

En cuanto a las firmas premium, Audi se mantiene como la marca más rentable del grupo. Aunque vendió un 0,7% menos, su facturación subió un 6,2% hasta los 53.068 millones de euros, dejando un beneficio antes de impuestos de 5.546 millones de euros tras firmar un margen por unidad del 10,5%, un 5% más que en 2020. Por su parte, Porsche cerró cifras similares, aunque en su caso las ventas subieron un 10,9% hasta las 302.000 unidades. La compañía de Stuttgart se vio beneficiada en el reparto de semiconductores dentro del grupo por su mayor rentabilidad y margen de beneficio por unidad, que se situó en el 16,5%. Con una facturación de 30.289 millones de euros, un 16,1% más, su beneficio operativo fue de 5.006 millones de euros, un 24,5% más.

En el segmento de lujo, Bentley sigue mejorando desde que tocara fondo hace casi un lustro. Sus ventas mejoraron un 30,8% hasta las 14.659 unidades, con lo que su facturación subió otro 38,9% hasta los 2.845 millones de euros, dejando un beneficio operativo de 389 millones de euros. Volkswagen Group China, la división del grupo que opera en el mercado del Gigante Asiático, vendió 92.700 coches eléctricos el año pasado sobre un total de 3,3 millones de unidades, un 14,1% menos. Su beneficio antes de impuestos fue 3.026 millones de euros, reduciéndose desde los 3.602 millones de 2020. Volkswagen Financial Services firmó un beneficio antes de impuestos de 5.628 millones de euros, más del doble respecto a 2020.