La invasión de Rusia sobre Ucrania ha vuelto a disparar los precios de los mercados energéticos, con las cotizaciones de petróleo, del gas y, con ello, también de la electricidad registrando fuertes incrementos. Pese a la tensión creciente en los mercados, Iberdrola ha anunciado su compromiso de mantener sin cambios sus tarifas de luz y de gas para sus clientes con tarifas del mercado libre.

La eléctrica promete congelar el precio de los contratos actuales a precio fijo con que cuentan siete millones de clientes. Los hogares y empresas con tarifas del mercado libre de luz y de gas cuentan con un precio estable y fijo, y de momento no les han afectado las subidas desorbitadas del mercado eléctrico. Las compañías revisan esas tarifas de manera anual o bienal. A lo que se compromete Iberdrola es a no subir esas tarifas en la siguiente revisión.

Según la compañía, un tercio de estos siete millones de clientes tienen contrato con un precio estable hasta 2025, por lo que tienen garantizado el coste del servicio hasta esa fecha. “ La compañía no somete a las fluctuaciones del mercado a sus clientes. Mantiene las tarifas comprometidas”, sentencia la compañía, que subraya que ha estado ofreciendo tarifas eléctricas en los últimos meses por debajo del precio de la tarifa regulada.

Además del compromiso anunciado, Iberdrola asegura estar manteniendo los precios eléctricos de los grandes clientes industriales y “haciendo un gran esfuerzo ofertando nuevos contratos a precio fijo a largo plazo, a un precio inferior a la referencia diaria del mercado”.

La pasada semana, en una conferencia con analistas para presentar los resultados de Iberdrola en 2021, el presidente Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, subrayó que la compañía no se beneficiaba de los altos precios del 'pool' eléctrico, ya que vende su energía "a precios fijos a sus clientes". "Los precios pueden pasar de 50 a 200 euros por megavatio hora (MWh), pero no hemos vendido a 200 euros. Si hubiera sido así se habría multiplicado por dos nuestro resultado. Nunca hemos estado vendiendo nuestra energía a los precios 'pool', especialmente en el mercado español, hemos mantenido nuestra política de precios fijos y no nos ha beneficiado".