El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha insistido en que no toca hablar del salario mínimo interprofesional (SMI), sino de salvar a las empresas y a la economía, y ha recordado que el IPC está cayendo un 0,8%.

"No estoy diciendo que haya que subirlo o no, pero lo que digo es que ahora no toca hablar de esto", ha remarcado el líder de los empresarios en un encuentro organizado por LLYC.

Según Garamendi, ahora se debe hablar de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) y de cómo se mantienen, de cómo se ayuda al comercio o a la hostelería y no de hablar de otras, como de la jornada laboral de cuatro días.

"El SMI no es un tema tanto del diálogo social como una obligación del Gobierno y cuando digo del Gobierno, no digo del Ministerio de Trabajo, sino que pasa por la Comisión Delegada y de ahí va al Consejo de Ministros, que es el que toma la decisión", ha apostillado Garamendi.

También ha recordado que uno de los datos que se tienen en cuenta para fijar el SMI es el del IPC y que, en noviembre, este ha sido del -0,8%.

El presidente de la CEOE ha subrayado que el SMI afecta especialmente a los más vulnerables, los dueños de bares, tiendas de proximidad pequeñas, a la agricultura, entre otros.

También ha recordado que el año pasado, cuando se firmó la subida hasta los 950 euros al mes, se pidió como condición que se tuviera en cuenta que el SMI ha crecido un 30% en los últimos años, mientras que los contratos públicos "no han cambiado".