La vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha abierto la puerta a que las ayudas para los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) puedan continuar en algunos sectores o ámbitos que se están viendo más perjudicados a partir de septiembre.

En una entrevista en Antena 3 ante la pregunta de si se van a extender los ERTE más allá de esta fecha, Calviño ha asegurado que hay que pensar si a partir de septiembre hay que continuarlos a lo mejor en algunos sectores o en algunos ámbitos y transformarlos para que sean más similares a los de Alemania.

En este sentido, ha señalado que hay que estudiar transformar los ERTE de un instrumento de reacción a corto plazo a uno con características más parecidas a las que tienen en Alemania, a fin de fomentar que se invierta en la formación de los trabajadores y sea una oportunidad de recualificación del empleado y no solo de mantenimiento del empleo.

La ministra, no obstante, ha indicado que el Gobierno está trabajando en ello y que todas las medidas que se puedan adoptar se verán con los agentes sociales.

Asimismo, ha insistido en que el apoyo público a los ERTE ha sido uno de los instrumentos más eficaces durante esta pandemia para evitar la destrucción masiva de empleo y ha agregado que los datos de agosto han ido "bastante bien" y que de hecho se está recuperando el dinamismo del mercado laboral.

A este respecto, Calviño ha apuntado que los ERTE han sido un mecanismo muy útil en la primera fase de resistencia y que ahora se irán adaptando para apoyar la reactivación económica y la incorporación de estos trabajadores.

De hecho, ha recordado que ya hay un 75 % de los trabajadores que estaban afectados por un ERTE que ya se han reincorporado.

Ante el retraso en el cobro de los ERTE, ha subrayado que el Gobierno está haciendo un esfuerzo enorme y que el objetivo es que todo el mundo que tenga derecho a ello lo cobre evitando fraudes, para lo que ya están haciendo inspecciones.

Asimismo, ha apuntado que hay que evitar "por los todos los medios" que algunos ERTE puedan derivar en ERE o en concursos de acreedores generando un daño estructural en la economía y que hay que ser conscientes del "altísimo" coste fiscal de estas medidas y que llevan a emitir este año 100.000 millones de deuda pública adicional.