Con la actividad económica paralizada casi por completo durante semanas, el papel que vienen desempeñando las entidades financieras resulta ahora más relevante que nunca. Proporcionar liquidez al sistema ha sido determinante para mitigar los efectos del parón drástico de actividad que ha provocado la crisis sanitaria y lo seguirá siendo para iniciar la reconstrucción económica, la generación de riqueza y el mantenimiento del mayor número de puestos de trabajo a medio y largo plazo.

Los bancos están siendo el vehículo que hace posible que los créditos y avales puestos a disposición por la administración pública lleguen allí donde son ahora más necesarios.

En estos momentos tan cruciales para el futuro del conjunto de la sociedad, el sector financiero se ha convertido en el motor para reactivar la economía y dar el oxígeno necesario al tejido productivo y a las capas más desfavorecidas y afectadas de la población española.

Medidas financieras

Las entidades de crédito adheridas a CECA (CaixaBank, Bankia, Kutxabank y Cajasur Banco, Abanca, Unicaja Banco, Ibercaja Banco, Liberbank, Caixa Ontinyent, Caixa Pollença y Cecabank) están canalizando los avales del programa ICO, dotado con 100.000 millones de euros, para preservar la liquidez de las empresas y autónomos en un contexto de caída drástica de la actividad empresarial.

Hasta el 31 de mayo se han concedido un total de 177.240 operaciones por importe de 20.068 millones de euros. En este contexto de recesión, la pérdida de empleo o la reducción de actividad de negocios particulares hacen que algunas familias tengan dificultades para hacer frente a los pagos de su hipoteca. De hecho, en un escenario de recuperación gradual, la previsión del Banco de España es que el paro se acerque al 20%.

Las entidades financieras están concediendo moratorias para el aplazamiento de las cuotas de préstamos hipotecarios, dirigidas a aquellas personas que como consecuencia de la crisis sanitaria, se han visto económicamente afectadas por un expediente de regulación temporal de empleo o se enfrentan a un cese o reducción de su actividad económica u otras circunstancias. Hasta el pasado 31 de mayo, las entidades de CECA han formalizado 329.027 operaciones de moratoria de préstamos por un importe total de 15.610 millones de euros.

Otra de las acciones implementadas ha sido el adelanto de las prestaciones por desempleo a más de 3 millones de trabajadores y de pensiones de jubilación a más de 9 millones de beneficiarios. La batería de medidas activadas por las entidades de CECA es amplia y puede consultarse en su web http://www.ceca.es/medidas_entidades_covid/

Obra y acción social

De forma paralela a los servicios ofrecidos por los bancos y cajas, la Obra y Acción Social de las fundaciones de CECA se ha volcado en programas de ayuda a los grupos más desfavorecidos de la población.

La actividad de los bancos de alimentos, el apoyo asistencial, la donación de material sanitario necesario en las UCI o programas de educación financiera, son algunas de las tareas que llevan a cabo estas instituciones de forma diaria. Con una inversión cercana a los 135 millones de euros para potenciar los programas existentes y activar otros de nueva creación, durante estos meses, esa labor, tan importante como a menudo invisible, ha cobrado más valor que nunca.

Es probable que en los próximos meses aumenten la desigualdad y la pobreza, como consecuencia de esta crisis y una vez más, como ha ocurrido siempre, la Obra y Acción Social estará junto a aquellos que más lo necesiten. Por eso es tan importante el papel de estas instituciones y de los profesionales y voluntarios que trabajan para hacer realidad esta impresionante misión.