El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha anunciado un Plan de Inversión Extraordinaria en Carreteras con una inversión de 5.000 millones de euros que aportará el capital privado y el BEI, que permitirá construir o mejorar unos 2.000 kilómetros de autovías y se espera genere un total de 189.200 empleos.

El objetivo del plan es contribuir a reactivar la obra pública, que actualmente está en mínimos históricos, y seguir mejorando la red de infraestructuras sin afectar al compromiso de cumplimiento del objetivo del déficit público. En virtud del plan, el Ministerio de Fomento acometerá durante los próximos cuatro años una veintena de obras de construcción de carreteras "de envergadura" que sumarán unos 2.000 kilómetros de longitud.

Estos proyectos se contratarán mediante contratos de concesión, por los que las constructoras adelantarán, con apoyo del BEI, la inversión necesaria para acometer la obra que, una vez puesta en servicio, se encargarán además de mantener durante treinta años.

Las empresas recuperarán esta inversión precisamente cuando la carretera esté en explotación para los conductores. A partir de entonces, recibirán un pago anual del Estado durante cada uno de los treinta años en los que asumirán el mantenimiento de las vías que, de esta forma, quedan libres de peaje para los usuarios finales.

Según los cálculos del Gobierno, este pago anual supondrá unos 350 millones de euros al año, importe que supone un 20% del Presupuesto del Ministerio de Fomento. El Gobierno aún no ha determinado el paquete de obras concretas que se acometerán a través de este plan, que se determinarán después del verano junto con las empresas del sector, con el fin de iniciar también entonces el proceso de su contratación.

"Tenemos unas magníficas infraestructuras y queremos seguir mejorándolas, implicando en ello a la iniciativa privada, mirando a Europa y manteniendo el compromiso con el objetivo de déficit", aseguró Rajoy durante la presentación del plan en un acto en La Moncloa al que acudieron representantes del sector.

"Además, este plan será un potente motor de crecimiento económico, impulso a la competitividad, la cohesión territorial, la seguridad vial y, en definitiva, la calidad de vida de los ciudadanos", subrayó el presidente.