El Banco Santander ampliará su capital en algo más de 7.000 millones de euros a un precio de 4,85 euros por acción, lo que supone un descuento del 19,16% respecto al precio de cierre de la sesión de este lunes, o del 17,75% frente al precio teórico de los derechos de suscripción.

Según ha informado la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), para captar este capital el banco colocará 1.458,23 millones de nuevas acciones con un valor nominal de 50 céntimos de euro más una prima de emisión de 4,35 euros por acción, por lo que el tipo de emisión total de las nuevas acciones será de 4,85 euros, y el importe efectivo total del aumento de capital ascenderá a 7.072,43 millones de euros.

Este aumento de capital tiene por objeto "reforzar y optimizar la estructura de recursos propios del banco" y hacer frente a la adquisición del 100 % del Banco Popular.

Durante quince días naturales que se estima que irán desde el 6 al 20 de julio, ambos inclusive, los derechos de suscripción preferente se negociarán en las bolsas de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia, así como en las de Lisboa y Buenos Aires.

Los derechos de suscripción preferente que no sean ejercitados se extinguirán automáticamente a la finalización de dicho periodo.

Los accionistas titulares de derechos de suscripción preferente, así como aquellos inversores o accionistas que los adquieran en el mercado, podrán solicitar la suscripción de un número de acciones adicional al que les correspondería por el ejercicio de sus derechos, para el supuesto de que al término del período de suscripción preferente no se hubiera cubierto íntegramente el aumento de capital.

Esto siempre que unos y otros ejerciten durante el período de suscripción preferente la totalidad de los derechos de los que sean titulares.

El Banco Santander añade que ha suscrito un contrato de aseguramiento y colocación por la totalidad del aumento de capital con un sindicato de entidades de crédito, por lo que la operación está totalmente asegurada.

El propio Banco Santander, Citigroup y UBS actuarán como entidades colocadoras globales del aumento de capital.