El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, viajará hoy a Bruselas para participar en la cumbre de líderes de la eurozona que analizará las consecuencias del referéndum griego y en la que pretende defender que se acelere la negociación de la UE con Grecia porque persisten los problemas.
Tras conocer el triunfo del "no" en la consulta del pasado domingo en Grecia, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, convocó esta cita en la capital belga para debatir la situación y analizar la posibilidad de una nueva negociación con el país heleno.
Rajoy (que ayer ya mantuvo conversaciones telefónicas con varios líderes europeos, entre ellos la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro italiano, Matteo Renzi) presidió en el Palacio de la Moncloa una reunión de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos para analizar el "no" griego.
En una entrevista en Telecinco, avanzó que su posición va a ser defender una agilización de la negociación con Grecia. "Se ha negociado, debe seguir negociándose y hay que terminar rápidamente la negociación", subrayó.
Recordó que los bancos griegos siguen cerrados e insistió en la necesidad de "acelerar las cosas" y fijar "con claridad" lo que hay que negociar. "No podemos continuar así", añadió el jefe del Ejecutivo.
Rajoy subrayó que el "no" del referéndum "no es bueno para los griegos ni para Europa". "Pero es igual, estamos para resolver la situaciones complejas, estamos dispuestos a ayudar a Grecia", agregó.
Pero para lograrlo, insistió en que Grecia tiene que cumplir con las normas y los procedimientos "porque si no, es imposible poder continuar".
