La deuda neta de las entidades españolas con el Banco Central Europeo (BCE) ha caído un 7,2% en el mes de julio respecto al mes anterior, hasta los 160.694 millones de euros, con lo que se ha situado en su nivel más bajo desde febrero de 2012, según los datos provisionales hechos públicos por el Banco de España.

La deuda de la banca española con el organismo que preside Mario Draghi se ha reducido en 87.599 millones de euros en un año. Este importe se ha reducido un 35,3% desde julio de 2013 y ha acumulado dos descenso mensuales consecutivos tras el repunte de mayo.

La deuda de las entidades financieras se incrementó en casi 80.000 millones de euros en marzo de 2012 y superó los 200.000 millones. Ahora se sitúa claramente por debajo de esta barrera y lejos del máximo de 388.736 millones registrado en agosto de 2012.

Este importe es el saldo vivo que las entidades residentes en España aún tienen pendiente de devolver al instituto emisor europeo como consecuencia de la financiación que el organismo les ha concedido previamente.

Mientras, la parte que representa esta financiación neta de la banca española respecto al total del Eurosistema se ha establecido en el 31,6%, prácticamente el mismo nivel que el mes anterior, tras llegar a superar el 80% antes del rescate bancario.

Caída del 13 % en el eurosistema

En julio, la deuda total de las entidades que operan en la Eurozona con el BCE se ha rebajado a los 507.639 millones de euros, lo que supone un retroceso del 12,7% respecto al mes anterior.

A la vista de los datos publicados de manera provisional por el Banco de España, la dependencia de las entidades financieras españolas con el BCE se ha reducido, algo que pone de manifiesto la cifra de apelación bruta, que se ha situado en los 160.699 millones de euros, un 7,9% menos que el mes anterior.

Si solo se tiene en cuenta esta apelación bruta en relación al conjunto europeo (530.790 millones), la financiación del Eurosistema correspondiente a la banca española también se reduce respecto al mes pasado y se sitúa en el 30,3%. Este porcentaje se mantiene aún muy por encima del que correspondería a España en función de su aportación el Producto Interior Bruto (PIB) de la zona euro (alrededor del 13%).

'Hucha' con el BCE

El importe bruto de apelación no recoge el dinero que los bancos españoles han tomado prestado del BCE y han vuelto a depositar a resguardo del organismo.

La banca española redujo practicamente a cero (cinco millones) el dinero que tenía aparcado en julio, lo que se explica tras el anuncio del BCE de que cobrará por primera vez en la historia a los bancos por guardar su dinero.

El tipo de interés aplicable a la facilidad de depósito se sitúa en el -0,10%. Sin embargo, el conjunto de las entidades del Eurosistema depositó 23.420 millones, una reducción menor frente a los 26.542 millones de hace un mes.