El índice de precios de consumo (IPC) retornó en julio a tasas anuales negativas, con una caída del 0,3 %, la mayor desde octubre de 2009 cuando el descenso fue del 0,7 %, según ha confirmado el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Este dato coincide con el adelantado por este organismo el pasado 30 de julio.

Los grupos con mayor influencia en la bajada de julio son transporte (con una variación del 0,1 %, un punto inferior a la del mes anterior), vivienda (variación del 1,2 %, nueve décimas por debajo de la de junio) y alimentos y bebidas no alcohólicas (que disminuye su tasa cinco décimas, que es negativa el 2 %).

Asimismo, influyó la evolución de ocio y cultura (tasa negativa del 1,6 %, siete décimas menos que en junio) y de bebidas alcohólicas y tabaco (que cae un punto y medio, hasta el 0,6 %).

Además, el IPC mensual de julio también registró una tasa negativa, del 0,9 %, con especial incidencia de los descensos de vestido y calzado (12,9 %) y vivienda (0,5 %).

La tasa anual del IPC disminuyó en todas las comunidades autónomas.

El mayor descenso se produjo en Navarra (tasa negativa del 1 %, con una disminución de ocho décimas), seguida con un descenso de seis décimas por tres comunidades con tasas negativas, Castilla-La Mancha (0,8 %), Castilla y León (0,5 %) y País Vasco (0,1 %).

La tasa anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se mantuvo en el 0 % y la del índice de precios de consumo armonizado (IPCA) se situó en zona negativa del 0,4 %.

El IPC a impuestos constantes (IPC-IC) registró en julio una tasa anual negativa del 0,3 %, la misma que el IPC general.