La banca española ha visto caer sus ingresos por comisiones en un 16 % desde que se inició la crisis hace cinco años, pese a la ofensiva comercial de las entidades para sacar rendimiento a algunos servicios y gestiones que antes ofrecían gratis.

Según los últimos datos publicados por la Asociación Española de Banca (AEB), las entidades ingresaron 5.789 millones de euros en comisiones en los nueve primeros meses de 2012, el 16 % menos que los 6.910 millones que cobraron en el mismo mes de 2007.

Sin embargo, la asociación de usuarios de bancos, cajas y seguros (ADICAE) acaba de publicar un estudio en el que muestra que en estos años, algunas entidades han llegado a elevar hasta en un 185,9 % el precio que cobran a sus clientes por servicios como el mantenimiento de cuentas, las tarjetas o la extracción de dinero en cajeros.

Según el estudio de Adicae, que distingue en sus conclusiones entre los bancos con más volumen de negocio, la banca extranjera presente en España y las siete entidades intervenidas o con graves dificultades económicas, la gran banca ha duplicado en estos cinco años el precio anual que cobra por tener una cuenta corriente, que ha alcanzado los 60 euros al año en algunas entidades.

Las cuotas anuales de las tarjetas de crédito y débito tampoco se han salvado de estos encarecimientos, dice el estudio, que explica que las primeras se elevaron el 35,24 % -de 28,43 a 38,45 euros- mientras que las segundas crecieron el 59,73 % -de 13,71 a 21,90 euros.

Por su parte, las entidades intervenidas son las que han encarecido las comisiones en mayor proporción a pesar de haber recibido fondos públicos, lo que para Adicae significa que "quieren que los consumidores paguen sus errores de gestión".

De esta forma, la comisión por mantenimiento anual de una cuenta en estas entidades pasó de los 18,91 euros que cobraban en 2007 a los 45,85 euros que cobran de media actualmente, lo que representa un incremento del 142,46 %, explica el informe.

Asimismo, la cuota anual de la tarjeta de crédito se encareció el 95,95 % en el caso de la banca intervenida o con problemas, ya que pasó de 28,43 euros en 2007 a los 55,71 euros de 2012.

Por su parte, la banca extranjera con mayor presencia en España sigue los pasos de la nacional, ya que también ha aumentado de forma exponencial las comisiones que aplica desde 2007.

Las entidades financieras que operan en España lograron un beneficio neto conjunto de 3.386 millones de euros entre enero y septiembre de 2012, lo que supuso una caída interanual del 63,7 % por la crisis y por el intenso esfuerzo realizado en dotaciones a provisiones.