El sindicato UGT calcula que cerca de 4.000 trabajadores se verán afectados por el proceso de fusión de Banesto y Santander, que supondrá el cierre de 700 sucursales.

En declaraciones a RNE, recogidas por Europa Press, el miembro del comité de empresa de Banesto Ignacio Soto ha explicado que en cada oficina de la filial trabajan una cuatro personas, una cifra que multiplicada por las 700 sucursales que se clausurarán y sumado al recorte que se plantea hacer en servicios centrales, arroja una media de 4.000 empleados afectados en una primera fase.

"Nos han comentado que van a ser vías no traumáticas, pero hay que concretar en qué van a consistir", ha manifestado Soto, quien ha avanzado que el comité de empresa ha solicitado al banco una reunión en la que poder firmar un protocolo de empleo que garantice que el ajuste de plantilla se realice teniendo en cuenta la igualdad y la voluntariedad.

El sindicalista ha indicado que las palabras que el presidente del Santander, Emilio Botín, dirigió ayer a los trabajadores no han tranquilizado "en exceso" a la plantilla. En este sentido, se ha referido a las medidas de movilidad internacional que ofrecieron ayer, junto con las bajas incentivadas voluntarias, para los empleados a los que afecte el proceso de reestructuración.

"Estamos hablando de un concepto de movilidad geográfica internacional. La nacional ya supone un problema importante. Si hablamos de internacional, el problema es mucho mayor. Habría que concretar en qué causas, motivos y compensaciones. Hablamos de mover familias incluso de un país a otro. Tendría un impacto que a priori nos preocupa", ha destacado.

Soto también ha valorado que el impacto que tendrán las prejubilaciones en este proceso será "relativo", puesto que la media de edad de trabajadores de la filial "probablemente" no supere los 46 años.

"Por encima de los 52 años no habrá más de 2.000 personas en una plantilla de 8.100 trabajadores. El impacto sobre prejubilaciones tiene un recorrido limitado en nuestro banco. Con 58 años no hay más de 100 empleados", ha precisado.

Finalmente, ha desvelado que a los trabajadores de la entidad les preocupa la reforma laboral, aunque ha recordado que hasta la fecha han podido resolver problemas parecidos sin que se haya tenido que aplicar y ha insistido en que Botín ya adelantó este lunes que no se plantearía un ERE. "Confiamos en su palaba", ha zanjado.