El Gobierno portugués quiere volver a bajar en 2013 las indemnizaciones por despido, de 20 a 12 días por año, para cumplir las condiciones del rescate financiero concedido por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

En declaraciones a los periodistas, el primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, precisó hoy que la reducción de la indemnización, la segunda en poco más de un año, se negociará con los agentes sociales antes de presentarla al Parlamento, donde el Ejecutivo conservador tiene mayoría absoluta.

El Gobierno luso ya avanzó en diciembre de 2011 que tenía intención de aprobar esta reforma, aunque finalmente la ha postergado hasta el próximo año.

En el memorando de entendimiento original acordado en mayo de 2011 con la "troika", que integran la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el FMI, Portugal se comprometió a reducir sus indemnizaciones laborales e "igualarlas a la media europea".

En revisiones posteriores, los técnicos de la troika detallaron sus exigencias e instaron al país a rebajar esta compensación a un período de entre ocho y doce días.

"El Gobierno asumió el compromiso de legislar y escogió el límite superior para causar la menor polémica posible. Se trata de un valor acordado con la UE y el FMI en base a los estudios realizados", defendió Passos Coelho.

Las nuevas indemnizaciones entrarán en vigor en 2013, de acuerdo con las previsiones del líder conservador, cuyo Ejecutivo ya aprobó una primera bajada de las compensaciones en noviembre de 2011.

Entonces, esas compensaciones pasaron de 30 a 20 días por año trabajado para los nuevos contratos con un límite de doce meses, medida que perseguía mejorar la "flexibilidad laboral" en el país, en palabras del propio Gobierno.

La troika consideró que Portugal tenía una de las legislaciones europeas más proteccionistas con los trabajadores, que hacía su mercado laboral demasiado rígido, y propuso modificarla bajo la premisa de que abaratar el despido fomentaría la contratación.

Pese a estar previsto en el memorando, el anuncio de Passos Coelho generó de inmediato críticas de los sindicatos y la izquierda, entre ellas las del principal grupo de la oposición, el socialista, que denunció la inexistencia de análisis fiables sobre cuántos son los días de indemnización laboral media en la UE.

"Hasta el momento, no se ha presentado ningún estudio que justifique este corte a doce días. En el memorando firmado con la troika se habla de igualar, pero no se precisa el número de días por año", recalcó en declaraciones a los medios lusos el diputado Nuno Sá.

El parlamentario justificó así sus críticas a la medida laboral vinculada al rescate de Portugal, que pidió y negoció el año pasado el Gobierno socialista de entonces.

Varios economistas y los principales sindicatos argumentaron igualmente contra una reducción tan fuerte de las indemnizaciones, y recordaron que el salario medio en Portugal, de unos 17.000 euros anuales, es uno de los más bajos de toda la UE, al igual que el gasto del Estado en subsidios sociales y ayudas a los desempleados.

La propuesta del Ejecutivo luso de rebajar la indemnización a doce días ha ido también más allá de las tesis defendidas por la patronal, que en 2011 reclamaba reducir la compensación por despido a unos 15 días por año de antigüedad.