Los salarios bajaron en España entre un 3 % y un 4 % en 2010 y 2011, informó hoy la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que indicó que situaciones como ésta ilustran el impacto de las políticas destinadas a reducir el costo de la mano de obra con respecto a la producción.

"Grecia, España y Portugal están en el epicentro de la crisis de la Eurozona, con Grecia como el caso más grave de reducción unilateral de salarios para recobrar competitividad (...), pero hemos visto que el impacto de este tipo de políticas en el empleo y el crecimiento ha sido peor de lo esperado", dijo hoy el director general de la OIT, Guy Ryder.

Al presentar en Ginebra el Informe Mundial sobre Salarios 2012/2013, Ryder se hizo eco de las advertencias de que en esos países se está llegando a una situación de "emergencia social" por los "niveles de desempleo que son insostenibles y socialmente inaceptables".

Aunque la evaluación realizada por la OIT indica que, de manera general, los salarios evolucionan desde hace muchos años a un ritmo mucho más lento que la productividad, también se reconoció que en algunos países, como España y Grecia, ocurrió la contrario.

Uno de los autores principales del informe, Patrick Belser, precisó que uno de esos casos fue el de España, donde la productividad bajó un 0,5 % entre 1999 y 2007, pero los salarios aumentaron el 0,4 % a un ritmo anual.

En el mismo periodo, la productividad en Grecia creció el 2,7 %, pero los salarios se expandieron por encima, hasta un 4 %, por año.

En esos casos, "la historia antes de la crisis es que los salarios evolucionaban más rápido que la productividad y la historia de la crisis, hasta ahora, parece ser la de salarios cayendo más rápido que la productividad, como si fuese un mecanismo de ajuste", explicó Belser.