El mes de mayo suele ser un mes positivo para el empleo gracias a que se pone en marcha la maquinaria de la industria turística española de cara a la temporada de verano, y este año no ha sido una excepción. Según informaba ayer el Ministerio de Trabajo, el número de desempleados descendió en 79.701 personas durante el pasado mes, un 1,87% menos, lo que supone la mayor bajada en este mes desde el inicio de la crisis a finales de 2007 y el segundo mejor dato del mismo periodo. Tras este recorte, que supone el segundo mes consecutivo a la baja en el paro registrado, los desempleados apuntados al antiguo Inem se reducen a 4,18 millones.

El paro disminuyó en todos los sectores destacando agricultura y construcción y en todas las comunidades autónomas. El Ministerio de Trabajo calcula que una media de 300.000 parados se reenganchan al mercado de trabajo cada mes, por lo que hay una contratación «dinámica».

La secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, subrayó que se trata de un dato positivo que anima al Gobierno a seguir trabajando, porque todavía son muchas las personas a las que se debe ayudar a prepararse para regresar al mercado de trabajo.

El paro bajó en mayo en ambos sexos, aunque más entre los hombres, al reducirse en 55.890 (-2,64%), frente a una bajada del desempleo femenino en 23.811 hombres (-1,11%), situándose el total de hombres en paro en 2.064.581 y el de mujeres, en 2.125.078. El desempleo de los jóvenes menores de 25 años se redujo en mayo en 16.896 personas (-3,61%) respecto al mes anterior, mientras que entre las personas mayores de 25 años bajó en 62.805 (-1,65%).

En términos interanuales, el paro ha aumentado en 123.457 personas en mayo, (+3,04%), mientras que en mayo de 2010 el incremento fue de 446.063 desempleados más que el año precedente (+12,3%).

Por sectores económicos, el paro registrado disminuyó en los servicios en 34.613 personas (-1,39%); en la construcción bajó en 20.922 personas (-2,75%); en la industria lo hizo en 10.663 personas (-2,13%); y en la agricultura descendió en 5.059 personas (-3,58%). El paro registrado bajó en mayo en todas las comunidades autónomas, salvo en Ceuta (+928) y Melilla (+82). Entre las que más disminuyó el desempleo destacan Andalucía (-20.259), Islas Baleares (-6.854) y Cataluña (-6.199). En cuanto a las provincias, el desempleo registrado desciende en 50, entre las que destacan: Islas Baleares (-6.854), Málaga (-5.607) y Sevilla (-4.904).

En cuanto a la contratación, el número de contratos registrados en el mes de mayo fue de 1.288.914, lo que supone un incremento del 9,04% respecto al mismo del pasado año, es decir, 106.814 empleados más.

En el mes de mayo se registraron 103.176 contratos de trabajo de carácter indefinido, un 8% del total. Los contratos indefinidos del mes de mayo se dividen, en cuanto a la duración de su jornada, en 63.428 a tiempo completo y 39.748 a tiempo parcial. Los primeros son 6.559 (-9,37%) menos que en mayo de 2010 y los segundos se han incrementado en 1.471 (+3,84%).

Además, la afiliación a la Seguridad Social aumentó en 117.900 personas de media en mayo.

Para el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el dato del paro es «positivo, sin duda», aunque reconoció que la cifra global de desempleo sigue siendo «altísima». Por ello, explicó que el gran objetivo del Gobierno es que esa tendencia se consolide y si es posible, se intensifique en los últimos meses de este año y en los primeros de 2012.

La portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, advirtió de que, si se descuenta la estacionalidad en el empleo, en mayo hay 38.000 parados más, por lo que pidió al Gobierno que no se conforme con esta cifra porque «quedan reformas pendientes».

Para CC OO, el desempleo disminuyó en sectores y actividades tradicionalmente intensivos en mano de obra y poco productivos, y consideró que sólo reduciendo la temporalidad y creando empleo estable se conseguirá que España sea un país competitivo. UGT advirtió de que los puestos de trabajo estacional no contribuyen a asentar la recuperación.Las patronales CEOE y CEPYME reclamaron reformas que mejoren la flexibilidad interna de las empresas.